Francia no quiere repetir el error de la Eurocopa que perdió hace dos años contra Portugal y se mentaliza para ello. ¿Cuáles son las coincidencias de este equipo a la selección que ganó el Mundial de 1998?

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15 de julio de 2018, 7:44 AM
15 de julio de 2018, 7:44 AM
Cada selección tiene su propia historia. Cada generación de jugadores hace su propio camino.

Pasa lo mismo con este equipo francés que está a poco de jugar la final del Mundial de Rusia 2018.

Para llegar al partido decisivo, Les Bleus tuvieron que vencer a los críticos, superar las adversidades y responder todas las preguntas formuladas después de sus actuaciones "regulares" en la víspera del torneo.

"Hubo dudas sobre nosotros al comienzo del torneo", admitió el mediocampista Paul Pogba el jueves.

Sin embargo, aquí están, a un juego de ganar una segunda Copa del Mundo 20 años después de la gloria alcanzada por la selección de Zinedine Zidane.

"Es el partido más importante de nuestra vida", afirmó el capitán Hugo Lloris.

Franceses
Hasta ahora, Francia parece imparable | Reuters

¿Por qué 2018 es diferente a 2016?

Lo primero que Pogba dijo a sus compañeros de equipo en el vestuario después de la victoria por 1-0 ante Bélgica en la semifinal del martes fue sobre 2016, cuando perdieron la final la Eurocopa en la capital francesa.

"No podemos cometer el error de dos años atrás", afirmó el volante ante todos sus compañeros y el entrenador Didier Deschamps.

"Falta un juego más. No hemos terminado aquí. Guardemos la calma, la ganamos y luego disfrutamos", concluyó.

Pogba y los otros ocho jugadores que estuvieron en París hace dos años saben exactamente lo que sucedió contra Portugal.

Habían derrotado al campeón mundial Alemania en la semifinal 2-0 y creían que el trofeo ya era suyo.

"Estábamos muy eufóricos después de derrotar a Alemania. Pensamos que ya estaba hecho", dijo el delantero Olivier Giroud.

"Esta vez es diferente. No nos estamos dejando llevar. Somos felices, pero sabemos que el trabajo aún no está hecho", prosigue.

Giroud contra un belga
Giroud, por ahora, no ha marcado en el Mundial | AFP

Pogba reconoce con mucha honestidad cómo fue la tragedia de 2016.

"La semifinal contra Alemania se sintió como si hubiéramos ganado la final. Pensamos que Portugal era un trámite por realizar. Ese fue nuestro error. Confíen en mí, esta vez no vamos a cometer el mismo error. Vamos a dar todo y ser fuertes para ganar esta vez ", indicó.

Las fortalezas mentales y colectivas de este equipo son muy superiores a las de hace dos años, según los propios futbolistas.

Tienen hambre de gloria y están decididos.

Deschamps demostró su punto

Deschamps está a un juego de convertirse en el tercer hombre de la historia en ganar la Copa Mundial como jugador y entrenador después de los brasileños Mario Zagallo (1958, 1962 y 1970) y Franz Beckenbauer de Alemania Occidental (1974 y 1990).

Deschamps fue el capitán en 1998 y 20 años después puede levantar el trofeo una vez más.

"Se merece mucho crédito", dijo el guardameta Lloris.

"Puso las cosas en su lugar y creó un equipo. Nada es más importante que Francia según su plan. Todos hacen el esfuerzo y juegan para el equipo. También aporta su tranquilidad, su serenidad, su experiencia", añadió.

Deschamps como DT y jugador
Deschamps es señalado como uno de los grandes responsables del éxito | Getty Images

Deschamps estaba enojado con los medios franceses al principio del torneo.

Pensó que eran demasiado críticos con él debido a las tres actuaciones de su seleccionado en la fase de grupos.

Trató de modificar las cosas antes del comienzo de la competencia y en el primer juego contra Australia.

Volvió rápidamente a su antigua fórmula ganadora: una formación táctica equilibrada, una defensa sólida y su suerte legendaria.

Incluso dijo hace poco: "¿Estoy a menudo en el lugar correcto en el momento correcto? Sí, desde luego".

Con su conservadurismo y su cautela, Deschamps ha hecho de este equipo su imagen.

Es posible que con este equipo Francia pueda jugar un estilo de fútbol mucho más agresivo, pero Deschamps ganó la Copa del Mundo de 1998 con un fuerte espíritu de equipo y una defensa impresionante.

Él ha transferido eso a sus jugadores.

Pogba
Pogba se encuentra en su mejor momento futbolístico | Reuters

Los líderes finalmente aparecieron

Durante años la gente se preguntaba cuánto tiempo le tomará a Pogba convertirse en el jefe de este equipo.

No hace falta volver a hacerlo.

Dentro y fuera del terreno de juego, finalmente, el jugador ha madurado lo suficiente para asumir la responsabilidad y el liderazgo de Les Bleus.

"Siempre ha sido líder, pero esta vez se interpeló y se dio cuenta de que tenía que hacer más por el equipo", dijo el defensor Samuel Umtiti, quien anotó el gol ganador en la semifinal.

"Hace el esfuerzo para el equipo más que antes. Necesitábamos que adquiriera una nueva dimensión en esta competencia en todos los niveles, y lo ha hecho", añadió.

Al igual que Pogba, otro miembro de la generación de 1993 que ha pasado a primer plano en este torneo es Raphael Varane, que fue inmenso contra Bélgica.

Él también tomó un papel mucho más importante fuera del campo.

"Siempre fue un líder. Lo tiene en su sangre. Ha crecido con este equipo", dijo Pogba.

Varane, como Pogba, solo tenía 21 años en 2014.

Mbappe
Mbappe mostró toda su clase en el partido con Argentina | Getty Images

Y luego está Kylian Mbappe. A los 19 años, todavía no es un líder completo, pero es el líder técnico de este equipo.

Su talento es inconmensurable. Él es el tipo de genio que solo ves una vez cada 25 años.

Cada vez que toca la pelota, sucede algo. Su ritmo, sus habilidades, su confianza, su madurez, su inteligencia parecen normales en él.

Tiene absolutamente todo para reinar en el mundo del fútbol durante la próxima década.

¿1998=2018?

Veinte años después, las similitudes entre Francia 1998 y Francia 2018 son sorprendentes.

Primero que nada, Deschamps es un discípulo de Aime Jacquet, el entrenador de 1998.

Por lo tanto, no es sorprendente encontrar muchos puntos en común entre los dos equipos.

Al igual que Jacquet, Deschamps ha construido un escuadrón armonioso y homogéneo.

Dejó algunos grandes talentos en casa, como Anthony Martial, Dimitri Payet o Adrien Rabiot, porque no encajaban en el espíritu de equipo que quería construir. Jacquet hizo lo mismo.

Francia ganó en 1998 con una defensa increíblemente fuerte, y en 2018 es casi tan sólida.

Francia 1998
Hace 20 años, Francia fue campeón del mundo | Getty Images

En 1998, tres defensores marcaron en la competencia: Bixente Lizarazu, Laurent Blanc y Lilian Thuram.

Tres han anotado hasta ahora en Rusia, Benjamin Pavard, Varane y Umtiti, y han sido grandes goles.

La fuerza colectiva, la madurez y el control de los dos equipos son muy similares, excepto que el de 2018 es mucho más joven, con 25 años y ocho meses de promedio general.

El equipo de 1998 tuvo su estrella indiscutible, al igual que la versión 2018. Zidane y Mbappe nacieron con 26 años de diferencia, pero son dos genios que creen en la filosofía del equipo.

Olivier Giroud tiene la misma mentalidad. Él trabaja duro, pero aún no ha marcado.

Su frustración solo se oculta por el éxito del equipo, pero Stephane Guivarc´h, que no es tan talentoso como Giroud, tuvo un Mundial similar en 1998.

Esta generación también tiene un amuleto de la suerte.

En 1998, Laurent Blanc solía besar la cabeza calva de Fabien Barthez antes de cada juego. Esta vez, los jugadores acarician el bigote de Adil Rami.

Mbappe comenzó con la cábala antes del juego con Argentina y luego los demás lo siguieron.

Los jugadores de fútbol a menudo son supersticiosos y, por ahora, el bigote de Rami es tan importante para ellos como la cabeza de Barthez para el equipo de 1998.

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