Un día después de que se entregara a la Policía el narcotraficante Pedro Montenegro, el ministro de Gobierno hizo una cronología de los hechos, acusó a la oposición y medios de comunicación de armar una "parafernalia barata", se declaró víctima de las redes sociales y anunció procesos a los anónimos que identificó

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12 de mayo de 2019, 13:48 PM
12 de mayo de 2019, 13:48 PM

En 52 minutos, en el programa estatal ‘El pueblo es noticia’, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, hizo una cronología del último escándalo que ha tenido al Gobierno y a la Policía en el ojo del huracán. El caso, que involucra a Pedro Montenegro, jefes policiales, jueces y exmagistrados; concluyó ayer –al menos el primer capítulo– con la entrega voluntaria del narcotraficante a la institución verde olivo.

El ministro, evidentemente molesto por las críticas de los bolivianos en las redes sociales sobre este caso y casi al final de la entrevista, terminó dando algunos detalles de cómo fue la entrega, pese a que había prometido dejarlo para después: “Él se entregó y dijo: ‘ya no tengo más opción, pido que garanticen mi vida y que dejen de hostigar a mi familia”.

Defendió ‘a capa y espada’ que con las estrategias ejecutadas –entre las que se cuentan 52 allanamientos, así como operativos aéreos, fluviales y terrestres–  el narco de 38 años estaba acorralado y no tenía otra opción más que entregarse o ser aprehendido.

Montenegro tenía orden de captura internacional desde 2015 por tráfico de drogas, pese a ello fue reconocido el año pasado por el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de Santa Cruz, el entonces coronel Gonzalo Medina. También, entre otras cosas, auspició un tours a Cartagena (Colombia) a un grupo de 18 personas, entre las que se encontraban otros dos jefes policiales y el hijo de Medina

Romero se declara víctima y anuncia procesos

El nivel de impunidad en el que se movía Pedro Montenegro en algunas unidades policiales de Santa Cruz, donde tejió vínculos con jefes, además de funcionarios de alto y bajo rango del poder judicial; hundió a la institución verde olivo en su más profunda crisis y puso al ministro de Gobierno, Carlos Romero, en el blanco de las críticas.

En los 52 minutos de tiempo televisivo en “El pueblo es noticia” la autoridad también tuvo tiempo para decir su verdad sobre si tuvo o no que ver en la designación y ratificación del excoronel Gonzalo Medina como director de la Felcc Santa Cruz. Dijo que no. También acusó a los opositores y medios de comunicación de armar “una parafernalia barata” en torno al caso y resaltó los logros de su gestión.

Pero, eso no fue todo. Sostuvo que todo este tiempo, el caso salió al ojo público a partir de la segunda quincena de abril, hizo seguimiento a lo que se publicaba en las redes sociales y que tomará cartas en el asunto. Esto fue lo que dijo al respecto:

“Este tema ha sido tan perversamente deformado, en algunas redes sociales se han dicho tantas cosas. Todos los documentos de las redes sociales los estoy remitiendo, en condición de víctima, judicialmente para una profunda investigación y aquellos que han escrito anónimos también estoy enviando al Ministerio Público, con la identificación de los anónimos, afortunadamente. Se ha hecho un trabajo de peritaje, a través de detección informática, y se ha podido dar en muchos casos con anónimos que han escrito muchísimas cosas de descalificación en este tiempo".