El Año Nuevo Andino Amazónico y del Chaco se celebra cada 21 de junio en el hemisferio sur y en lugares considerados sagrados, cuya ceremonia recibe el nombre de Willka Kuti o Inti Raymi (regreso del Sol)

El Deber logo
21 de junio de 2019, 9:41 AM
21 de junio de 2019, 9:41 AM

Autoridades nacionales, organizaciones sociales y la población boliviana recibieron el viernes el Año Nuevo Andino Amazónico y del Chaco 5527 con ofrendas y rituales ancestrales a la Pachamama (Madre Tierra) en diferentes sitios sagrados del país, con deseos de mejores días y prosperidad en el desarrollo de Bolivia.

El presidente Evo Morales participó de esa actividad en la localidad de Tiwanaku, en La Paz, junto al canciller Diego Pary y otras autoridades, y recibió los primeros rayos del sol pasadas las 7:00.

Morales recordó que ayer la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) aprobó, por unanimidad, la propuesta de Bolivia de reconocer cada 21 de junio como el "Día Internacional de Celebración del Solsticio" en sus diferentes manifestaciones.

"Celebramos unidos el Año Nuevo Andino Amazónico y del Chaco, ritual milenario;de integración de los pueblos libres de Abya Yala, ahora reconocido por la #ONU como Día Internacional de la Celebración del Solsticio. Con el nuevo ciclo renace la esperanza de nuestra querida Bolivia", escribió el jefe de Estado en su cuenta Twitter.

El Año Nuevo Andino Amazónico y del Chaco se celebra cada 21 de junio en el hemisferio sur y en lugares considerados sagrados, cuya ceremonia recibe el nombre de Willka Kuti o Inti Raymi (regreso del Sol).

Las ofrendas que se entregan a la Pachamama son denominadas mesas, que contienen dulces, copal, incienso, pétalos de flores, nuez, cebo de llama, sullu (feto de llama), tierra de hormigas, además de hojas de coca, que son colocadas sobre un altar al que se le prende fuego, con el objetivo de que sea recibida por esa deidad aymara.