Mercado. Identifican y ven grandes expectativas en el sector de alimentos, software, productos y servicios en el área de metalmecánica y agronegocios (etanol). De 170 productos de su oferta exportable, Bolivia absorbe 60

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2 de octubre de 2018, 4:00 AM
2 de octubre de 2018, 4:00 AM

Empresas privadas de la provincia Tucumán (Argentina) aplican inteligencia comercial en Santa Cruz. La revelación la hizo el ministro de Desarrollo Productivo y el director ejecutivo del Instituto de Desarrollo Productivo de Tucumán (IDEP), Juan Luis Fernández y Dirk Trotteyn, respectivamente, en el marco de la feria multisectorial Expocruz 2018.

A decir de Fernández, los empresarios de Tucumán conciben a Santa Cruz, en particular, y a Bolivia, en general, como vetas de mercado para intercambiar la oferta exportable que generan las empresas de la provincia argentina. Justamente, en ese marco, hizo notar que la búsqueda de aliados comerciales, caso de Santa Cruz, es clave en este momento cuando el mercado interno de su país se muestra recesivo y las empresas intentan colocar sus productos en el exterior para mantener la escala de actividad productiva.

En esa oferta de Tucumán al mundo, en el caso de Bolivia, Fernández señaló que participan con exportaciones interesantes de harina de trigo, fideos, jugos de frutas, golosinas, pinturas, base asfáltica, aislantes, mármol sintético, azúcar refinada, entre otros productos. “Bolivia es un aliado estratégico para Tucumán por la cercanía geográfica, hablamos el mismo idioma y tenemos gustos más o menos parecidos en muchas cosas”, refirió Fernández.

A juicio de Trotteyn, Bolivia es uno de los principales destinos de la oferta exportable de Tucumán, que en su portafolio comprende 170 productos en más de 150 países. Bolivia absorbe más de 60 productos de la oferta industrial de la provincia argentina. “Este país tiene un peso muy importante en las exportaciones tucumanas y significan, en valor, más de $us 10 millones, con una tasa de crecimiento bastante sostenida”, indicó.

Hizo saber que a través del IDEP se aplica inteligencia comercial en Bolivia, y en Santa Cruz, en particular, para identificar nichos de mercado en sectores cuyo potencial de oportunidad comercial para las industrias tucumanas es creciente. Así, por ejemplo, dijo que hay vetas identificadas y expectativas grandes en el sector de alimentos, software, productos y servicios en el área de metalmecánica y agronegocios (etanol).

En este último tema apuntado, Trotteyn dijo que Tucumán tiene una ventaja relativa muy importante porque tiene una institución -Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres- que es la vanguardia del país en lo que hace a tecnología científica en caña de azúcar y de soya adaptadas para el Norte Argentino. De hecho, aseguró, que gran parte del área sembrada de soya de Bolivia es de la variedad Munasqa, que incorpora genes de resistencia a herbicidas y que es producida en dicha estación experimental.

Tucumán, a través de la estación experimental y de la universidad San Pablo, tiene producción de lo que se llama bioplantas, o sea, plantas de caña de azúcar obtenidas a partir de yemas saneadas que no tienen ninguna enfermedad de virus ni de ninguna especie. Esa tecnología está siendo demandada por las agroindustrias azucareras de Bolivia y han comenzado las tratativas para transferir esta tecnología y así mejorar la calidad de la caña semilla que se usa en Santa Cruz, donde hay una apuesta muy fuerte en el programa de bioetanol y cogeneración eléctrica a partir del bagazo y vinaza concentrada de caña de azúcar.

Dio cuenta, además, que hay un ensayo de caña transgénica resistente a sequía y a glifosato que ha comenzado a desarrollarse en Tucumán, pero que en Brasil y en EEUU ya es comercializada. Abarata costos de producción y permite producir este cultivo en zonas de baja precipitación pluvial.

Desde la perspectiva del presidente de la Cámara de Exportadores, Logística y Promoción de Inversiones de Santa Cruz (Cadex), Oswaldo Barriga, la experiencia que tiene Argentina en el desarrollo industrial y agroindustrial, en general, es una habilidad que debe ser jalada hacia Bolivia. “El desarrollo de los biocombustibles y la industria de la construcción tienen un peso muy importante para generar ese tipo de inversiones en nuestro país”, apuntó.

Según dijo, hoy por hoy, por el tipo de cambio actual, llevar productos de Bolivia a Tucumán u otras provincias de Argentina no es un buen negocio para los empresarios nacionales, pero vemos interesante el hecho de que empresarios vengan a invertir y que a través de esas iniciativas empezar a fortalecer los lazos comerciales entre Santa Cruz y Tucumán.

Barriga cree que se debe aprovechar la potencialidad agroindustrial y exportadora de Tucumán.

 

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