Según el Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA), la agricultura familiar pierde terreno ante la agroindustria y deja en la pobreza extrema al 33% de la población rural.

El Deber logo
19 de enero de 2019, 17:21 PM
19 de enero de 2019, 17:21 PM

A pesar del buen desempeño económico registrado en el país en los últimos años, la pobreza sigue siendo un grave problema en las zonas rurales donde se registra un 55% de pobreza moderada y un 33% de pobreza extrema, según datos del Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA).

"Si bien Bolivia continúa avanzando en el terreno de la salud, la educación y la infraestructura productiva, la pobreza rural sigue siendo grave" aseguró Cornelia Richter, Vicepresidenta del FIDA luego de una gira de evaluación de Pro-Camélidos y Accesos, los dos programas que financia en Bolivia con dos créditos por valor de 39,9 millones de dólares y una donación ASAP de 10 millones de dólares.

En declaraciones a ANF, Richter explicó que las operaciones financiadas por el FIDA permiten desarrollar las capacidades técnicas y de negocio de las organizaciones rurales, promueven innovaciones tecnológicas, agregan valor a los productos agrícolas y ayudan a los pequeños agricultores a ser más competitivos.  

Arnoud Hameleers, representante del FIDA en Bolivia detalló que "aunque se canalizan pequeñas donaciones, la mayoría de los recursos que canaliza la institución son préstamos a largo plazo y bajas tasas de interés, que además exigen contrapartes tanto del gobierno nacional como de los municipios, así como los aportes propios de los beneficiarios".