Cientos de músicos y coristas se reunieron ayer  para rendir homenaje y despedir en capilla ardiente al maestro venezolano José Antonio Abreu, creador del Sistema Nacional de Orquestas de Venezuela.

Los jóvenes músicos llenaron el auditorio principal del Centro de Acción Social por la Música, en Caracas, e interpretaron las notas de himno nacional venezolano y varias piezas frente al féretro de Abreu, quién falleció el sábado en la capital venezolana a los 79 años.

El tributo comenzó a reunir desde la mañana a los varios cientos de músicos que forman parte del quijotesco proyecto de Abreu que acudieron a expresar su pesar por la partida del hombre que dedicó su vida a combatir la desigualdad y la pobreza con música.

El músico reconocido con el premio Príncipe de Asturias de las Artes por el programa de música Sistema Nacional de Orquestas de Venezuela, murió tras un largo periodo de afecciones. 
 

"El maestro Abreu, como le decían cariñosamente, entendió que la música era instrumento educativo para la liberación, la transformación y la inclusión social", dice en la página web del ministerio de Comunicaciones de Venezuela. 

Oriundo de Valera, estado Trujillo, nació el 7 de mayo de 1939. A los 9 años de edad inició sus estudios de música con la pianista y profesora Doralisa de Medina.

El 12 de febrero de 1975, fundó el Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela; con apenas 12 jóvenes, Abreu se propuso masificar en los niños el aprendizaje de la música a través de orquestas sinfónicas y coros. Esta red de orquestas involucra a cerca de 500.000 jóvenes músicos.

Abreu luchó incesantemente por incluir a niños y jóvenes afectados por la pobreza o con pocas oportunidades para su formación, a través del Sistema. Su labor fue reconocida en el año 2016, por la Unicef (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, por su sigla en inglés).