Loud ‘N Around es una banda de músicos franceses. Trabajaron durante meses para viajar y enseñar música a niños en situación de calle. Visitaron Burkina Faso, Camboya y Vietnam. Son universitarios

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6 de julio de 2019, 4:00 AM
6 de julio de 2019, 4:00 AM

A pesar de los 12 grados que ayer se sentían, los 12 músicos de la agrupación francesa Loud ‘N Around (se pronuncia laudanaraund) tocaron con entusiasmo. El público, formado por niños en situación de calle, escuchaban atentos el armónico estrépito de los bronces.

El escenario: el Parque Urbano, uno de los lugares donde suelen pasar su tiempo algunos de los pequeños. El recital empezó antes de mediodía, y la atención de los niños solo pudo ser quebrada cuando llegó un enorme termo con chocolate caliente que trajeron los integrantes de la Red Departamental por los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes en Situación de Calle.

Los jóvenes de la agrupación Loud ‘N Around estudian Ingeniería en la École Centrale Paris. Integraron la banda de ese centro de estudios y eligieron, como proyecto solidario, enseñar música.

Su viaje empezó en enero de este año, según cuenta Jean Baptiste Laval, el baterista y líder musical del grupo. Jean Baptiste es un pedagogo natural que despierta rápidamente la curiosidad de los niños.

Antes de iniciar este viaje, que se ha prolongado durante seis meses, se prepararon no solo con la investigación documental, sino con la creación de talleres musicales. Pusieron en práctica talleres de ‘despertar musical’ y de apreciación en la escuela primaria Henri Wallon, en Palaiseau (Francia).

Trabajaron con ONG locales, cuidadosamente seleccionadas para que coincidan con sus convicciones y objetivos educativos.

Entusiasmo y planificación

Si bien la Centrale Paris sabe de su proyecto y les entregó una subvención, los jóvenes aprovecharon un permiso de trabajo para tocar en bodas y fiestas de pueblo. El objetivo era reunir dinero para su viaje.

Organizaron una colecta de fondos en línea, explicando detalladamente su proyecto. Exalumnos y personas de buena voluntad pusieron dinero y empezaron un viaje que definitivamente los transformó.

“En Burkina Faso, en Vietnam, en Camboya, en Bolivia, encontramos personas diferentes. Eso nos enriqueció personalmente”, cuenta Jean Baptiste.

“Somos músicos. Ayudamos con música, que es inaccesible para algunos. Esperamos que después de haber compartido con ellos, sientan que pueden hacer música”.

Durante un mes, esta entusiasta docena de franceses estuvo enseñando en Mi Rancho, un proyecto que recibe a menores (actualmente, en el lugar viven 19, entre 11 y 20 años de edad).

Loud ‘N Around buscó varias instituciones donde pudieran permanecer dando clases. Como Mi Rancho es un hogar permanente, les resultó más fácil concentrarse en los chicos que estaban interesados en algún instrumento específico, dice Ximena Rojas, responsable de la Asociación Mi Rancho.

Para apreciar sonidos

Además de las clases en Mi Rancho, Loud ‘N Around brindó clases iniciales de disfrute de la música en el colegio Boliviano Japonés de Cotoca.

Después de mostrar cómo se organiza un tema musical, el grupo dejó que los niños toquen la batería, las trompetas, el trombón y la desafiante tuba. Luego jugaron un poco de fulbito.