Ocho personajes de distintos puntos del país serán homenajeados desde las 11:00 en el salón Pedro y Rosa de esta casa periodística, como recompensa a su esfuerzo, dedicación y entrega en favor de otros

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12 de diciembre de 2018, 4:00 AM
12 de diciembre de 2018, 4:00 AM

En una ceremonia, cuyo inicio está marcado para las 11:00 de hoy en el salón Pedro y Rosa, el Diario Mayor EL DEBER entregará la vigésima versión de la estatuilla Patujú de Bronce, estímulo reservado al Personaje del Año: hombres, mujeres o instituciones que ejecutaron grandes ideas y proyectos, que cumplieron sueños y ayudaron al prójimo con sus habilidades, con su solidaridad, con sus valores, su esfuerzo y su inteligencia.

En la presente gestión han sido seleccionados por esta casa periodística ocho protagonistas: Said Eduardo Pérez, experto en robótica; la Clínica Jurídica de Palmasola, el colectivo cultural Resiliencia, el Movimiento Niunamenos, Diseños y Autores Bolivianos, el agricultor Marín Condori; el piloto de carreras en motocicleta Marco Antezana y Daniela Lozano, una jovencita que venció el cáncer y hace pelucas para dibujar sonrisas en sus semejantes.

El acto contará con la presencia de todos los galardonados, a los que editores de las áreas Digital, Seguridad, Escenas&Cultura, Mundo, Sociales, Economía, Diez y Santa Cruz de EL DEBER entregarán la estatuilla forjada en bronce que rinde honores a la flor más bella y colorida que simboliza la identidad nacional.

Una motivación

“El que nos hayan considerado para este reconocimiento es muy enriquecedor y es motivador para todos nosotros, que hemos estado luchando, trabajando e incluso trasnochándonos para que se le dé su verdadera importancia a la cultura. Es algo que nos da ánimos para seguir adelante y no parar”, comentó la artista plástica Alessandra Abruzzese, una de las voceras del colectivo Resiliencia, que lucha por una ley municipal de culturas que contemple un presupuesto justo para las expresiones artísticas y culturales de Santa Cruz de la Sierra.

“Al enterarme de que había sido nombrada Personaje del Año me sentí muy honrada, feliz y me llena de orgullo poder recibir un premio así”, dijo Daniela Lozano, quien padeció cáncer y le hizo saber que el tratamiento es caro y que la pérdida del cabello es algo que afecta sicológicamente a las mujeres, lo cual la movió con sus compañeros de colegio a reunir cabello, trenzarlo y fabricar pelucas que donaron a pacientes del Oncológico.

Consuelo Camacho, del Colectivo Rebeldía, expresó su alegría en nombre del directorio colegiado de la Plataforma de lucha contra la Violencia hacia la Mujer por la decisión del Diario Mayor de premiar la acción de más de 20 organizaciones de mujeres que combaten el machismo y apuntan a fortalecer a las bolivianas en el camino de su liberación.

“Esta es una muestra que EL DEBER es un aliado de las causas de las mujeres, que asume su trabajo de manera responsable contribuyendo con su tarea en la mejora de condiciones para el ejercicio de los derechos de las mujeres”, afirmó la organización.

“Wow, gracias, eso nos ayudará mucho con la promoción y la búsqueda de apoyo”, fue la respuesta de Juan Carlos Pereira, principal creador del Diseño y Autores Bolivianos (DAB), uno de los eventos de moda más importantes que hubo en el país.

“Sin duda, recibir este reconocimiento de parte de uno de los medios de comunicación más importantes de Bolivia es un incentivo para seguir trabajando por el desarrollo de la ciencia y la tecnología en Bolivia. Recibir el Patujú de Bronce me compromete a pensar en los pasos a seguir en el fomento de la juventud hacia este mundo de la ciencia y la tecnología, que nuestro país apenas ha comenzado a vislumbrar todos sus beneficios”, dijo Said Pérez, experto en Robótica.

20 AÑOS DE UN GALARDÓN NACIDO EN LA REDACCIÓN

1998. La idea inicial fue hacer un brindis de cierre de gestión con gente destacada por la Redacción. Así nació en EL DEBER un premio que ya ha sido entregado a casi dos centenares de meritorios personajes, movimientos ciudadanos e instituciones de todo el país.

Para algunos, el Patujú de Bronce ha sido la consagración. Para otros, la coronación de una trayectoria. Son también varios los que han encontrado en la estatuilla el impulso que necesitaban para brillar y aportar. En medio de la desesperanza que traen las malas noticias, el Patujú de Bronce vuelve a reactivar la ilusión de un país marcado en 2018 por el fuerte despertar ciudadano y por el empoderamiento de la gente que está dispuesta con su fuerza soberana y propia a cambiar un entorno adverso.

La estatuilla forjada en bronce simboliza la flor más bella y colorida, la identidad nacional y la fuerza de la naturaleza. El artista Juan Bustillos es el hacedor de la misma, la cual fue concebida con toda la pasión y la paciencia para convertirla en una pieza única, valiosa y exclusiva.

Este Patujú es un orgullo de los bolivianos y obtenerlo es más que un premio, que esta casa periodística entrega desde hace 20 años a los hombres, mujeres, grupos e instituciones que inventan cosas nuevas, trabajan, se solidarizan, promueven ideas y ayudan al desvalido en pos de mejorar la calidad de vida de sus semejantes.

 

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