Una frase debajo del seno derecho produjo una bacteria en Luisa Fernanda Buitrago, que llegó hasta su médula espinal

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2 de octubre de 2018, 12:28 PM
2 de octubre de 2018, 12:28 PM

El recuerdo que sería para toda la vida terminó siendo una tragedia para Luisa Fernanda Buitrago, de 16 años.

Un tatuaje le produjo una bacteria que la terminó dejando en silla de ruedas, y por el tratamiento para eliminarla, perdió un bebé que esperaba.

"No me dejes caer jamás", dice la frase que la joven de entonces 14 años se tatuó donde un vecino en Casanare (Colombia), y que le costó 13 dólares. A los 15 días, Luisa estaba internada en un hospital, publica Infobae.

Los exámenes médicos descubrieron que una bacteria le afectó el nervio ciático y la médula espinal, que le ocasionó pérdida de sensibilidad en las piernas, presuntamente adquirida por la falta de asepsia del lugar donde se realizó el tatuaje y en los instrumentos con los que se elaboró.

"Empecé con un dolor de espalda, sentía hormigueo en los pies, se me inflamó el estómago, no sentía las partes íntimas", contó Luisa. Así perdió la habilidad de caminar, incluso de ponerse de pie, en cuestión de días.

A través de una resonancia, los médicos se dieron cuenta que tenía una infección en toda la espalda, por lo que fue sometida a varias cirugías y medicamentos. En ese procedimiento duró mes y medio y a causa de él tuvo un aborto espontáneo y perdió el bebé que esperaba.

Ahora espera una nueva cirugía con la que tiene posibilidades de volver a caminar.