Jair Bolsonaro está 12 puntos por encima de Fernando Haddad. Ayer, cerraron sus campañas con encendidas acusaciones. América Latina, a la espera de los resultados del domingo. Un obispo alerta que un triunfo de Bolsonaro sería un desastre para Brasil

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27 de octubre de 2018, 4:00 AM
27 de octubre de 2018, 4:00 AM

El ultraderechista Jair Bolsonaro, claro favorito para las elecciones del domingo en Brasil, se valió ayer de la prisión de Luiz Inácio Lula da Silva para agredir al progresista Fernando Haddad, quien volvió a alertar sobre el “odio” que encarna su adversario.

Ambos candidatos, que disputarán la segunda vuelta electoral del domingo, quemaron ayer sus últimos cartuchos en la televisión, uno de los principales medios para la propaganda política en el país, y lo hicieron con el mismo tono encendido que ha dominado sus campañas.

Según el último sondeo, difundido la víspera por la firma Datafolha, Haddad ha recortado la diferencia con Bolsonaro, pero aún así el capitán de la reserva del Ejército ganaría mañana con un 56% de los votos, frente al 44% que obtendría su adversario.

Apoyado en ese claro favoritismo que le atribuyen las encuestas, el líder de la ultraderecha aseguró que “existe una posibilidad concreta y real de ganar las elecciones”, por lo que instó a sus seguidores a mantener la “unidad” y la confianza.

“Si esa es la voluntad de Dios, estoy listo para cumplir esa misión”, manifestó Bolsonaro sobre su previsible victoria.

Corrupción, caballito de batalla

Bolsonaro atacó por el flanco de la corrupción, uno de los más incómodos para el Partido de los Trabajadores (PT), cuyo principal referente es el exmandatario Lula, en la cárcel desde abril pasado y quien fue sustituido como candidato presidencial por Haddad.

“La corrupción es una plaga que saca la comida de la mesa, que saca a los niños de la escuela” e impide el desarrollo de un país, afirmó un locutor en el espacio de Bolsonaro, en el cual se reiteró que Haddad “fue a la cárcel a pedir la bendición de Lula” para ser candidato.

El líder de la ultraderecha y capitán de la reserva del Ejército volvió a ofrecerse como un político “limpio” ante la Justicia y como un candidato “antisistema”, pese a que desde hace casi tres décadas ocupa un escaño en la Cámara de Diputados.

“Soy una amenaza para los corruptos”, declaró Bolsanaro en su último espacio de propaganda por televisión, en el que se presentaron videos con confesiones sobre prácticas corruptas que algunos líderes del Partido de los Trabajadores (PT) prestaron ante la Justicia.

En uno de ellos, el exministro de Hacienda Antonio Palocci da detalles sobre escándalos que salpicaron a Lula, a quien Bolsonaro convirtió hoy en su principal blanco, al punto de referirse a Haddad como “el fantoche del presidiario”.

El candidato progresista, por su parte, insistió en que apoyar al candidato de la ultraderecha supondrá favorecer “el odio y la violencia” en Brasil.

En su espacio, la campaña del PT volvió a criticar la negativa de Bolsonaro a participar en los cuatro debates previstos en televisión para las últimas tres semanas, que justificó en que aún se recupera de la cuchillada que sufrió durante un mitin en septiembre pasado.

“Bolsonaro huyó del debate y se esconde para esconder del país sus declaraciones desequilibradas”, dijo un locutor, tras lo cual fueron exhibidos vídeos con polémicas afirmaciones del candidato de la ultraderecha, todas de carácter machista, racista u homofóbico. También fueron proyectados videos en los que Bolsonaro se dice favorable a la tortura y defiende la dictadura que gobernó el país entre 1964 y 1985, y otros, de los últimos meses, en los que promete “fusilar” a los seguidores del PT o “barrerlos de la Patria”.

Más moderado

En un tono más conciliador, Haddad se dirigió a los electores, a aquellos que “están angustiados, se despiertan temprano todos los días y van a la lucha por un mundo mejor”, para exhortarles a “que no pierdan el coraje ni la fe”.

Haddad dijo que los brasileños desean “un gobierno que no acabe con los derechos, que ponga comida en la mesa, genere empleos y le dé paz y seguridad al país”.

Sin embargo, el mensaje del candidato del PT no ha calado hasta ahora, a tenor de lo que dicen todas las encuestas de opinión, las cuales apuntan a un claro triunfo de Bolsonaro este domingo.

Un obispo alerta

La posible victoria de Jair Bolsonaro en las elecciones presidenciales sería “desastrosa” para Brasil y para el mundo, según afirmó el presidente de la Comisión Pastoral de la Tierra (CPT), el obispo André de Witte, quien ha sido amenazado en redes sociales por su postura.

“Si Bolsonaro vence, nosotros esperamos que no, pero si él vence, va tener una repercusión drástica y desastrosa para muchas cosas, para las personas y para la sociedad como un todo y para la sociedad en el mundo”, afirmó a Efe De Witte, obispo de Ruy Barbosa, ciudad en el estado de Bahía, situado en el empobrecido nordeste de Brasil.

El líder católico, de 73 años, nació en un pueblo cerca de Gante (Bélgica), pero vive en Brasil desde 1976, cuando arribó en plena dictadura militar (1964-1985), la misma que tiene como modelo y que añora Bolsonaro.

“La posición de Bolsonaro sería realmente desastrosa” porque va a abrir las puertas “para el agronegocio, para la industria extractiva”, con lo que “el valor de la naturaleza preservada va a ser totalmente perjudicado”, advierte el líder de la CPT, una comisión del Episcopado brasileño.

De acuerdo con la Comisión Pastoral de la Tierra, De Witte ha sido amenazado de muerte en las redes sociales “por partidarios de Bolsonaro”.

El obispo, firme defensor de los derechos humanos, viajó la semana pasada hasta Ginebra y expuso ante la ONU sus temores sobre la realidad brasileña ya que, para él, la elección no es “simplemente entre dos candidatos, es entre dos sistemas”.

ONU pide prudencia

La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos hizo ayer un llamamiento a los actores políticos en Brasil para que eviten usar un discurso inflamatorio en la campaña electoral y les pidió que condenen cualquier tipo de violencia.

“Hacemos un llamamiento a los líderes políticos y a todos aquellos con influencia para que públicamente condenen cualquier tipo de violencia durante este delicado periodo electoral”, afirmó en rueda de prensa Ravina Shamdasani, portavoz de la Oficina.

“Hacemos un llamamiento a todas las partes para que se expresen pacíficamente, con respeto a los derechos de los demás”, agregó.

Shamdasani respondió así a una pregunta sobre las opiniones expresadas por el candidato ultraderechista Jair Bolsonaro, que lidera las encuestas de la segunda ronda de las elecciones presidenciales del próximo domingo en Brasil.

El expresidente de Colombia Ernesto Samper reconoció que mira “con tremenda preocupación lo que pueda pasar el próximo domingo en Brasil”, en referencia a la posible victoria del ultraderechista Jair Bolsonaro en las elecciones presidenciales.

Una victoria de Bolsonaro en la segunda vuelta electoral “sería una especie de salto al vacío hacia atrás, para acabar en un hueco en el cual no sabemos lo que va a suceder”, añadió Samper, también exsecretario de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).

Bolsonaro agradeció hoy el mensaje de respaldo que recibió del keniano-estadounidense Malik Obama, medio hermano del expresidente estadounidense Barack Obama. “Gracias Malik Obama”, respondió el polémico diputado en el mismo mensaje en Twitter en el que el medio hermano de Obama asegura que “Jair Bolsonaro será el presidente de Brasil”.

Un enorme operativo de seguridad se ha puesto en marcha en Brasil para garantizar las elecciones presidenciales.