El fortín Mónaco se transformó en un ícono del poder que tenía el narcotráfico en Colombia

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23 de febrero de 2019, 4:00 AM
23 de febrero de 2019, 4:00 AM

Una detonación controlada derribó ayer el edificio Mónaco, antiguo fortín del fallecido capo Pablo Escobar en Medellín y uno de los símbolos del narcoterrorismo que desangró a Colombia por casi una década.

En un espectáculo abierto a 1.600 personas, incluidas víctimas de Escobar, los ocho pisos del Mónaco se vinieron abajo a las 11:53 (16:53 GMT).

Sobre sus ruinas, se levantará un monumento que recuerde a los caídos por la acción del capo, abatido por la Policía en 1993, según la Alcaldía de Medellín.

Las autoridades remarcaron las heridas que dejaron los cárteles de la droga en la sociedad colombiana durante más de cuatro décadas.

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