El Servicio Secreto de Estados Unidos interceptó hoy paquetes sospechosos dirigidos contra el expresidente Barack Obama y la excandidata presidencial Hillary Clinton

El Deber logo
24 de octubre de 2018, 9:58 AM
24 de octubre de 2018, 9:58 AM

El expresidente Barack Obama, la derrotada candidata presidencial Hillary Clinton, el Gobernador de Nueva York y la oficina de la CNN en esa ciudad recibieron, con menos de 24 horas de diferencia y a dos semanas de elecciones clave de Estados Unidos, paquetes sospechosos de contener explosivos, informaron las autoridades el miércoles.

 

La interceptación de estos paquetes se produce cuando Estados Unidos está en plena campaña para las elecciones legislativas de mitad de mandato del 6 de noviembre, consideradas como un referendo para Trump y el gobernante Partido Republicano.

La Casa Blanca condenó lo que llamó actos "viles" dirigidos a Obama y a Clinton, las figuras de más alto perfil de la oposición demócrata.

 

"Estos actos de terror son viles y quien sea responsable deberá rendir cuentas con todo el peso de la ley. El Servicio Secreto de Estados Unidos y otras agencias de orden público están investigando y van a tomar todas las acciones apropiadas para proteger a cualquier persona que resulte amenazada por estos cobardes", dijo la secretaria de prensa, Sarah Sanders.

Los medios de prensa se apostaron en las calles aledañas a la residencia de Obama. Foto. AFP

 

Momentos después, la cadena de noticias estadounidense CNN dijo haber evacuado su oficina de Nueva York por el hallazgo de otro paquete sospechoso. 

 

El paquete enviado a Clinton, también exprimera dama durante la presidencia de Bill Clinton (1993-2001) y exsecretaria de Estado de Obama, fue detectado a última hora del martes en el condado de Westchester, Nueva York, dijo el Servicio Secreto, la agencia federal encargada de la seguridad de dignatarios y exdignatarios estadounidenses.

 

Temprano esta mañana, un segundo paquete dirigido a la casa de Obama fue interceptado en Washington, agregó en un comunicado.

 

"Los paquetes se identificaron inmediatamente durante los procedimientos de revisión de correo de rutina como posibles dispositivos explosivos y se manejaron de manera apropiada como tales", señaló el Servicio Secreto, especificando que ninguno de los destinatarios llegó a recibirlos.