El Reino Unido y la Unión Europea han alcanzado un principio de acuerdo sobre el "brexit" que la primera ministra británica someterá ahora al juicio de su gabinete de ministros

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13 de noviembre de 2018, 17:03 PM
13 de noviembre de 2018, 17:03 PM

El Reino Unido y la Unión Europea han alcanzado un principio de acuerdo sobre el "brexit" que la primera ministra británica, la conservadora Theresa May, someterá ahora al juicio de su gabinete de ministros.

Downing Street informó hoy de que los equipos negociadores de ambos lados del canal de la Mancha han pactado un borrador sobre las condiciones de la salida británica de la UE, casi 20 meses después de que Londres invocara el artículo 50 del Tratado de Lisboa, lo que inició una cuenta atrás de dos años para la ruptura.

El texto acordado debe recibir ahora el visto bueno del equipo de Gobierno de May, en el que una facción de euroescépticos se ha mostrado hasta ahora crítica con la marcha de las negociaciones, y ser respaldado más tarde por el Parlamento británico y los 27 socios comunitarios restantes.

La primera ministra ha convocado a su gabinete mañana, a partir de las 10:00 HB, para decidir cuáles serán los "siguientes pasos" que dé el Reino Unido.

Londres está bajo presión para avalar un borrador esta semana si quiere que Bruselas convoque una cumbre extraordinaria a finales de noviembre para formalizar el pacto.

Ese calendario daría espacio a May para presentar el acuerdo ante el Parlamento antes del receso navideño, lo que a su vez permitiría tramitar al inicio de 2019 las numerosas leyes que deben dar forma al "brexit" antes de que se materialice el divorcio, el próximo 29 de marzo.

Un retraso en esa agenda podría obligar además a algunas empresas a comenzar a activar planes de contingencia ante la posibilidad de que el Reino Unido rompa sus lazos con la UE sin un acuerdo.

Los líderes de la facción más euroescéptica del partido de May cargaron hoy contra el borrador del acuerdo, que según medios británicos puede superar las 600 páginas.

El exministro de Exteriores Boris Johnson, que lideró la campaña del "brexit" antes del referéndum de 2016, tachó de "inaceptable" el pacto, cuyos detalles todavía no se han hecho públicos, mientras que Jacob Rees-Mogg, uno de los "tories" euroescépticos más influyentes, acusó a May de incumplir sus promesas con ese borrador.

Los ministros del Gobierno, por su parte, fueron invitados esta tarde uno por uno a la residencia oficial de Downing Street para leer la "documentación" relativa al principio de acuerdo antes de la decisiva reunión de mañana.

El responsable de la disciplina de partido para los conservadores en la Cámara de los Comunes, Julian Smith, aseguró que espera que los ministros estudien detalladamente el borrador del acuerdo y se mostró confiado en que el texto puede ser aprobado por el Parlamento.

La libra esterlina respondió a la perspectiva de un pacto subiendo a niveles máximos en siete meses respecto al euro, si bien los analistas han advertido de que ese avance puede ser temporal, en caso de que el gabinete o el Parlamento tumben el borrador.

Según ha avanzado la televisión pública de la República de Irlanda, RTE, el acuerdo propone una solución para la cláusula de seguridad que exige la UE a fin de que no se levante una frontera en la región británica de Irlanda del Norte, la cuestión más espinosa de las negociaciones.

El Gobierno de Dublín ha alertado sin embargo de que todavía quedan "asuntos pendientes" por acordar antes de que pueda firmarse un acuerdo definitivo.

Para que el Parlamento británico otorgue eventualmente su respaldo al texto, May espera contar con el norirlandés Partido Democrático Unionista (DUP), de cuyos 10 diputados depende la mayoría conservadora en la Cámara de los Comunes.

El "número dos" de esa formación, Nigel Doods, advirtió sin embargo de que el Gobierno británico tendrá "muchos problemas" para sacar adelante el borrador.

"¿Será capaz de contentar a todo el mundo? Esa es la dificultad para Theresa May. Le va a ser muy, muy difícil hacerlo, en mi opinión, pero debemos esperar para conocer los detalles", afirmó el dirigente del DUP.

El líder de la oposición laborista, Jeremy Corbyn, consideró por su parte "improbable" que el acuerdo al que ha llegado May sea positivo para el Reino Unido. "Los laboristas hemos sido claros desde el principio con que necesitamos un acuerdo que proteja el empleo y la economía", escribió Corbyn en las redes sociales.

También se pronunció sobre el anuncio de un principio de acuerdo la ministra principal escocesa, la nacionalista Nicola Sturgeon, que advirtió de que el texto puede caer en la Cámara de los Comunes. En ese caso, el Reino Unido no debe dejarse "arrastrar" hacia una salida de la UE sin acuerdo, sino que debe poner sobre la mesa "mejores opciones", afirmó.