México cedió ante el Gobierno de Donald Trump. Unos 23.679 inmigrantes ya fueron arrestados entre enero y mayo de este año. Temen más detenciones y represión

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10 de junio de 2019, 6:00 AM
10 de junio de 2019, 6:00 AM

Comenzó el despliegue policial en la frontera sur de México para detener a migrantes tal como ordenó el presidente Andrés Manuel López Obrador en base a los acuerdos alcanzados con el Gobierno de Donald Trump.

Ayer, el Gobierno de México desplegó 103 policías para incrementar la seguridad y el control de la estación migratoria de Tapachula, en el sureño estado de Chiapas, fronterizo con Guatemala, informó la Secretaría de Seguridad Pública.

“El Servicio de Protección Federal (SPF) desplegó a 103 policías, 21 mujeres y 82 hombres, con la finalidad de brindar seguridad en la Estación Migratoria Siglo XXI del Instituto Nacional de Migración (Inami)”, detalló la institución en un comunicado.

Los policías apoyarán al personal del Inami en “atención de amotinamientos, fuga de migrantes y restablecimiento de la seguridad en la estación migratoria”.

Y lo hará “con base a los tratados internacionales”, según la Secretaría de Seguridad Pública.

 

Temor en la frontera

Instalado en un camión, un militar observa un desfile de imágenes en la pantalla de su ordenador. Sus ojos buscan formas humanas escondidas en vehículos; las de migrantes clandestinos.

En una carretera, cerca de la frontera entre México y Guatemala, las autoridades desplegaron un scanner para detectar migrantes que tratan de escabullirse para seguir rumbo al norte con el sueño de pasar a Estados Unidos.

Algunas decenas de metros más allá, se divisa otra barrera. Guardias fronterizos revisan minibuses y taxis y verifican la identidad de los pasajeros bajo la mirada de policías federales.

En los últimos días, los retenes policiales y militares fueron reforzados en esta región de Chiapas, al sur de México, principal puerta de entrada de los migrantes centroamericanos.

Esa movilización es parte del acuerdo sobre inmigración alcanzado el viernes por Estados Unidos y México y que evitó la imposición de aranceles de 5% a todos los productos exportados al poderoso vecino de norte.

“Estamos aquí las 24 horas”, dice uno de los agentes. De pronto, las autoridades detectan una familia de emigrantes. Padre, madre y tres hijos, incluido un bebé. Los cinco acaban en una camioneta de vidrios enrejados para su probable expulsión.