Las sirenas volvieron a sonar el sábado por la noche en Kiev por las bombas rusas

Ucrania instó el sábado (19.03.2022) a China, aliada estratégica de Moscú, a "condenar la barbarie" de Rusia, que siguió bombardeando ciudades ucranianas y estrenando nuevas armas, como un misil hipersónico.

Las sirenas volvieron a sonar el sábado por la noche en Kiev y los ataques aéreos rusos se sucedieron a un ritmo vertiginoso en Mikolaiv (sur), donde un bombardeo mató el viernes a decenas de soldados en un cuartel, informó el gobernador regional, Vitali Klim.

Hasta ahora no se han dado parte de daños ni de eventuales víctimas y las estimaciones de los testigos presentan grandes variaciones. Los rusos "dispararon cobardemente misiles contra soldados que dormían. Las operaciones de rescate prosiguen", indicó el gobernador Klim.

El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, cree sin embargo que la apuesta puramente militar no resolverá el conflicto y puede incluso resultar un arma de doble filo para Putin, acusado por ONG y dirigentes occidentales de cometer "crímenes de guerra".

Su asesor Mijailo Podoliak urgió a China a proyectarse hacia el futuro, condenando la "barbarie rusa".

"China puede ser un elemento importante del sistema de seguridad mundial si toma la buena decisión de apoyar la coalición de países civilizados y condena la barbarie rusa", tuiteó Podoliak, que forma parte del equipo de negociadores ucranianos.

Desde el inicio del conflicto, ambas partes han celebrado varias rondas de discusiones, la cuarta y última el lunes pasado.

En el oeste, el ministerio de Defensa ruso indicó que el viernes había usado por primera vez misiles hipersónicos "Kinjal", para destruir un depósito subterráneo de armas. El presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó que ese tipo de misil formaba parte de un arsenal "invencible".

Según el ministerio ucraniano de Defensa, las tropas rusas han efectuado 291 lanzamientos de misiles y 1.403 bombardeos aéreos desde el inicio de la invasión el 24 de febrero.