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10 de mayo de 2018, 4:00 AM
10 de mayo de 2018, 4:00 AM

A pocos días de los Juegos Suramericanos se han destapado importantes sospechas y llamativas dudas sobre al menos una decena de contratos que contemplan voluminosos recursos económicos. Algunas adjudicaciones directas a empresas han sido cuestionadas con documentación expuesta por el senador de Demócratas, Óscar Ortiz. Las respuestas han sido confusas y poco contundentes por parte de los organizadores de este gran encuentro internacional de deportistas. En algunos casos simplemente se han esquivado explicaciones.

El caso más resonante es el contrato con la empresa de un ex ministro. Tratándose de recursos públicos los presupuestados para los Juegos que se realizarán en Cochabamba, los ciudadanos necesitamos respuestas que nos tranquilicen sobre su gestión y uso transparente. Si son insuficientes o si no las dan, también están los organismos formales de investigación para exigir explicaciones. Solo así se evitará que la competencia deportiva quede deslucida. 

Los periodistas celebramos hoy nuestro día con nuevos retos. La disrupción tecnológica, la precarización de las economías de los medios y las presiones externas de los que ejercen poder obligan más que nunca a reforzar el temperamento de una profesión que siempre ha sido difícil de ejercer y que exige vocación de verdad. Son tiempos de incertidumbre, pero no, por ello, de desaliento, sino más bien de apasionantes desafíos.

Montero disfrutó por primera vez en su historia de un partido internacional. Parecía que no se llegaba a tiempo con la Caldera, pero finalmente los ejecutores de su refacción lo consiguieron hacer. Aplauso para ellos. 

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