Las fallas de Correa
Rafael Correa, expresidente de Ecuador, tiene ahora orden de captura porque debe someterse a la justicia de su país para responder por actos de corrupción cometidos en su intención de implantar el “socialismo del siglo XXI”. El haberse ido a vivir a Bélgica no le sirve de nada.
Algún error ha cometido, aparte de sus pecados, para que ahora se encuentre en la mira de Interpol. Debe ser similar al error cometido en Brasil por Luiz Inacio (Lula) da Silva, quien ya está alojado en una cárcel, también por corrupto.
El secreto está en el manejo de la justicia. Si vas a ser gobernante corrupto, dice la experiencia, tienes que tomar todas las previsiones, ajustando la justicia, pero cuidando que los jueces no sean cambiados cuando te hayas ido.
En el caso de Lula da Silva, su error fue no haber cambiado a toda la justicia, pero sobre todo no haber hecho desaparecer al juez Sergio Moro. Se le pasó el detalle.
En Argentina, doña Cristina de Kirchner no cometió ese error. El fiscal más peligroso no sobrevivió. Fue suicidado, meticulosamente suicidado.
De todos modos, algo queda en Argentina y todavía es probable que la señora vaya a la cárcel. Por el momento está muy ocupada tratando de hacerle la vida imposible al presidente que recibió la gigantesca tarea de poner las cosas en orden en su país.
En Venezuela, lo que hizo Hugo Chávez fue dejar no una justicia, sino todo un régimen, que incluye la justicia, capaz de evitar que las culpas caigan sobre su gestión. Se ha comprado a los militares, a los militares de segunda (hay un ejército secundario), a los policías y, por las dudas, ha creado un sistema de milicianos, o paramilitares. Todo a cargo de PDVSA, una empresa petrolera que, para mal de los pesares del difunto, está a punto de sucumbir.
La idea no es propia, es de los cubanos, que han convertido en una cárcel todo su país, una cárcel en forma de isla. Los habitantes de Cuba tienen prohibido pescar. Es la única isla del mundo en que los lugareños están prohibidos de pescar.
Para evitar que te pase lo que a Correa, tienes que dejar un sistema bien armado. Por ejemplo, una actividad económica capaz de solventar, por lo menos, al sistema judicial. Son detalles importantes.
