Opinión

Otra vez las ‘correcciones políticas’

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21 de abril de 2019, 4:00 AM
21 de abril de 2019, 4:00 AM

En defensa del 21-F, es decir del resultado del referéndum que le dijo a Evo Morales que no puede ser candidato de nuevo, se manifestaron la Unión Europea, los expresidentes agrupados en la Organización IDEA; se manifestó el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) y hasta el Senado de Estados Unidos; antes que este, el Grupo de los 13.

Entendamos que el tema no se circunscribe al “cambio de un artículo de la CPE”, sino que el espíritu del No se expresa en el principio que determinó que Morales no podía ser candidato nunca más, por más que a la señora Choque se le haya ocurrido dizque obedecer lo que determinó el Tribunal Constitucional Plurinacional al habilitarlo ilegalmente.

Bueno, el tema es que cada uno de los organismos e instituciones citados recurrió al principio de la institucionalidad democrática y aquí, en el país, a nadie se le ocurrió decir que no tenían derecho de opinar. En el peor de los casos, el oficialismo dijo que “somos soberanos”, soberanía que tratan de extender incluso a la posibilidad de un fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos de la OEA o que la Comisión de la misma organización supragubernamental se exprese rechazando el afán de reelección y abra con ello la posibilidad del “per saltum” y que el caso boliviano sea el primero de la lista, por urgencia y con dispensación de trámites.

El único que no se había pronunciado, en consecuencia, era Estados Unidos como Estado, pero cuando lo hizo, salieron 13 personas, que ahora son estigmatizadas, cuando nadie dijo nada de los voluntariosos pronunciamientos que nos hacen bien a los que creemos que el No, debe respetarse.

Pues, apenas se supo del trámite ante Trump (a mí no me gusta ni votaría jamás por él) Samuel Doria Medina dijo: “Creo que es una posición desatinada y un error… yo parto de un principio fundamental de que los problemas de los bolivianos los tenemos que resolver los bolivianos” ¡y listo! No hizo referencia a los pronunciamientos ya citados arriba.

Carlos Mesa fue más allá: y se despachó en Twitter: “La defensa del #21-F es un imperativo. Hacerlo pidiendo los “buenos oficios” de EEUU es inaceptable. No solo por su acción en Bolivia en el pasado, sino porque victimiza al Gobierno…”. Yo me pregunto: ¿los buenos oficios de los que se manifestaron antes, estaban bien? O, en todo caso, ¿no estaban mal porque no son Estados Unidos? Mesa se encargó que mediante este signo: # que el gobierno estadounidense sepa que él se opone a ellos “por su acción en Bolivia en el pasado”.

Me pregunto: ¿desde cuándo es tan antiyanqui Mesa? ¿Desde que salió del Gobierno? ¿O desde que siente que, en tiempo de elecciones, hay que ser ‘políticamente correcto’?

Creo que seguimos mal, porque los que lideran tendencias tratan de ubicarse en la demagogia antigringa que, seguramente, ni siquiera les va a dar dividendos políticos y no toman en cuenta que no nos va muy bien en eso de “arreglar lo nuestro entre nosotros”, cuando es un hecho que Morales tiene a la institucionalidad del Estado militando en su proyecto de reproducción del poder. También es un hecho que muy poco logrará Morales victimizándose con el mismo discurso de Mesa, porque si la declaración de Rocha lo ayudó, fue hace 15 años. Cuando eso ocurrió, la gente no sabía quién era Evo Morales y ahora lo sabe; ahora sufre la prepotencia, el abuso, la corrupción y el incremento del narcotráfico. Esos ahora son hechos y no supuestos de campaña.

En nuestro país pasan cosas que no debieran pasar y Morales tiene responsabilidad en ello, de manera que esa realidad no la va a modificar un pronunciamiento “gringo”, así sea de Trump, porque nadie le ha ido a pedir que intervenga en este país sino que muestre la misma preocupación que mostraron los citados; que se interese por este país al que solo lo toman en cuenta para referirse a políticas antidrogas, donde no quedamos bien parados.

Los tiempos se acortan y Morales no piensa detenerse, ténganlo en cuenta, los nuevos antiyanquis.

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