Opinión

Voten por mí

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18 de noviembre de 2018, 4:00 AM
18 de noviembre de 2018, 4:00 AM

¿Cómo no se me ocurrió antes? Pero no estoy seguro, si lanzo mi candidatura, podría debilitar seriamente a las fuerzas de la oposición y eso representaría asfaltarle el camino al prorroguismo dictatorial.

Brotaron aspirantes como hongos de un momento a otro, que me di cuenta que cualquier hijo de vecino puede aspirar a la presidencia y yo, soy hijo de vecino, pero no hijo del vecino.

¿Cuál es el perfil ideal?

Hay que tener una artillería de adjetivos de alto calibre para insultar. Insultar, así seas el presidente, es válido, aunque no debiera serlo porque el primer mandatario debía guardar compostura, ¡pero los dioses de barro se creen el juicio! Debo tener mucho cuidado en eso, porque la agresión verbal representa que no hay argumentos firmes para debatir. Es, como dice una comadre socio política que vive en mi barrio; pataleo de ahogados. De todas maneras, si hay que insultar voy a insultar. Me conocen que soy una fiera suelta para manejar el insulto. En el estadio la bandera más grande es mía y la extiendo cuan larga es para que lean ¡Váyanse todos al carajo!

Otro tema para hacer campaña es echar la culpa al imperialismo de todo lo que ocurre en nuestro país. Pensaba cambiar de imperialismo y achacarle al presidente ruso sobre todos nuestros males. Al fin y al cabo es un hijo de Putín.

Otro factor importante es el carisma. Mi suegra asegura que yo tengo carisma pero, comparado con Doria Medina, hasta Johnny es carismático.

Hay que atraer a las masas y en eso tengo muchas condiciones. Un día fui a animar una kermés de los panificadores y me volvieron a llamar para Todos Santos y hacer chistes negros. Los muertos quedaron felices y los panaderos murieron de la risa.

Hay que cautivar las fuerzas vivas de la nación. Yo conozco solo a las fuerzas opas de la plurinación, pero tengo unos amigos en el gimnasio que tienen mucha fuerza y perseverancia.

Entre otras cosas, hay que tener dinero y tiempo. Del dinero no me preocuparía porque donde hay política hay gente que pone plata y del tiempo, eso no es muy grave. Los gringos dicen ‘the time is money’ y tienen razón; el tiempo es un maní.

*Patriota entusiasta que ni comparsa tiene

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