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12 de junio de 2019, 4:00 AM
12 de junio de 2019, 4:00 AM

Un sismo han causado las filtraciones de una comunicación telefónica entre el exjuez Sergio Moro y el fiscal Deltan Dallagnol, sobre el caso Lava Jato, que permitió destapar la corrupción en el mundo empresarial y político de Brasil. Abogados, fiscales y parlamentarios alertan sobre el peligro de que la institucionalidad se vea amenazada. Si se mirara con el mismo cristal lo que pasa en nuestro país, el espanto habría matado a más de uno al ver la actuación de jueces y magistrados y evidenciar que muchas decisiones judiciales se tomaron después de que fueran “sugeridas” públicamente por algún funcionario del Poder Ejecutivo.

Hay una mala costumbre en varias instituciones públicas del país. No responden consultas periodísticas y dilatan la entrega de información requerida; pero cuando se publica una noticia que incomoda a sus mandantes, estos no dudan en criticar y acusar a medios y a reporteros. Podrían evitar la dramatización si cumplieran con la obligación de transparentar sus gestiones y proporcionar los datos solicitados.

Es viral el video que muestra la pelea entre un hombre y una comerciante en el mercado Siete Calles. Se pueden ver y escuchar agresiones físicas y verbales que no deben ser tolerables. Pero el hecho es un llamado de atención sobre un problema que no se resuelve en la ciudad: la existencia de comerciantes ambulantes que pretenden hacer un mercado en toda la urbe. Puestos con toda clase de productos nacen y crecen en diversas zonas de Santa Cruz de la Sierra por la simple voluntad de los gremialistas. Los esfuerzos municipales de ordenamiento no logran contrarrestar el problema. Frente a ello es fundamental también contribuir como ciudadanos y dejar de comprar al paso, aprender a tener conciencia y disciplina si no queremos vivir en el caos.

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