RfiMundo

Mugabe: el héroe de la independencia zimbabuense que se convirtió en dictador

Robert Mugabe murió lejos de su país, a los 95 años, en Singapur donde recibía su seguimiento médico. Su trayectoria está llena de grandes logros: nació y creció bajo un régimen racista, dedicó su juventud a la lucha contra el sistema y pasó 10 años en la cárcel.

El Deber logo
6 de septiembre de 2019, 15:02 PM
6 de septiembre de 2019, 15:02 PM

El hombre que liberó a su país de una brutal dictadura colonialista, se convirtió con los años en un tirano que sofocó la oposición y hundió a su país en la miseria. Falleció a los 95 años.

Cuando tomó el control de Zimbabue en 1980, poniendo fin al régimen racista de Ian Smith, Robert Gabriel Mugabe despertó una esperanza que le valió elogios internacionales.  En el mes de abril de aquel año, Rodesia del Sur dejaba de ser una colonia británica y tomaba el nombre de Zimbabue.

A la cabeza del ZANU-PF (Unión Nacional Africana de Zimbabue Frente Patriótico, por sus siglas en inglés), Mugabe triunfó militarmente del régimen de Smith y luego ganó ampliamente las elecciones de 1980 con promesas de apaciguamiento y de reconciliación entre blancos y negros.

Su trayectoria está llena de grandes logros: nació y creció bajo un régimen racista, dedicó su juventud a la lucha contra el sistema y pasó 10 años en la cárcel.

Inspirado por el marxismo, lanzó ambiciosos programas para mejorar la educación que permitieron aumentar la alfabetización en el país, invirtió en el sector agrícola, y prometió no tocar las propiedades de los terratenientes blancos que poseían la mitad de las tierras.

Hasta 1985, Zimbabue era la granja de África y uno de los principales productores de tabaco del mundo.

Sin embargo, su faceta heróica se fue degradando con las décadas de poder. A la matanza de 20.000 personas en los primeros años se sumaron la represión, las desapariciones de opositores y las torturas.

Mugabe deja un legado dividido, entre los que le consideran como el gran libertador panafricanista, y los que lo ven simplemente como un cruel dictador que ha hundido a su pueblo.

El tío "Bob", como lo llaman en Zimbabue, gobernó el país gracias a una máquina en su partido forjada durante casi cuatro décadas a su medida.

La "reforma" agraria

El conflicto con los terratenientes blancos fue el punto de quiebre económico y político del régimen de Mugabe. "En la década de los 90 hubo protestas dentro de su partido porque con la construcción de la independencia se hicieron promesas de reequilibrar la condición de la mayoría negra, sobre todo en materia de reparto de la riqueza y de las tierras", explica Jean-Arsène Yao, historiador marfileño y periodista de la revista Mundo Negro.

El régimen permitió entonces la confiscación de tierras de los terratenientes blancos. "Mugabe entró en una dinámica demagógica: públicamente quitó las tierras a los blancos para entregarlas a los negros. En realidad, fueron entregadas a una minoría negra, esencialmente gente del entorno del poder", detalla Jean-Arsène Yao, en entrevista telefónica con RFI.

Finalmente, la población pobre del país no se benefició del reparto de tierras, Zimbabue perdió sus apoyos internacionales y el sector productivo agrícola, abandonado por sus nuevos dueños incompetentes, se derrumbó. El país entró en crisis en la década de los 2000, con una inflación récord.

Se estima de hecho que casi un tercio de la población vive en la vecina Sudáfrica, es decir que convirtió su país en una pesadilla para sus propios ciudadanos.

En 2014, para allanarle el camino a Grace, su esposa y ex secretaria, 41 años menor que el, Mugabe destituyó a la vicepresidenta Joyce Mujuru y lo mismo le pasó en 2017 a Emmerson Mnangagwa, ex jefe de los servicios secretos y luego vicepresidente.

Fue el principio del fin para Mugabe: el ejército detuvo a sus familiares y su partido el Zanu-PF lo destituyó como presidente. Tras 37 años a la cabeza del país, Mugabe renunció. "Lideró la lucha por el fin del apartheid en Zimbabue, y pese a que fue tildado de déspota, creo que quedará en la memoria de los zimbabuenses y de los africanos, como una figura de la independencia de Zimbabue. Eso nadie se lo puede quitar", concluye el periodista Jean-Arsène Yao.

Robert Mugabe murió lejos de su país, a los 95 años, en Singapur donde recibía su seguimiento médico.

Con información de Gemma Parellada, corresponsal regional de RFI.