Cinco horas de espera, así es el viacrucis para sacar carné de identidad
El diario EL DEBER acompañó a un ciudadano en el trámite de renovación de cédula de identidad. El proceso duró cinco horas. El Segip acusa al periodo vacacional la alta demanda del documento
EL DEBER acompañó a Leandro para vivir junto a él la experiencia de realizar el trámite de renovación de su carné de identidad. Llegamos a las 11:00 a las oficinas del Segip, que están sobre el segundo Anillo y esquina San Joaquín (entre Av. Virgen de Cotoca y Av. Guapay), y después de cuatro horas y media recién se pudo ingresar al interior de las instalaciones. Allí se esperó casi otros 30 minutos más, hasta las 16:00, para obtener tan importante documento.
Durante la espera se pudo observar diferentes historias, unas más llamativas que otras, pero todas con un mismo condimento: su queja por el prolongado tiempo que toma culminar este trámite.
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También se observó que el personal de limpieza cuya función es retirar la basura que generan las personas que deben desayunar o almorzar en las instalaciones del Segip, pareciera sentirse superado por la cantidad de basura que generan los que van en procura de su documento. Se ven basureros, y también el piso, atiborrados de desechos.
Hay quienes consideran, como le manifestaron a EL DEBER, que la labor de recoger los desechos debe ser más fluida. Sin embargo, también quedó en evidencia la falta de educación en muchas personas, que prefieren tirar su basura en el piso y no en los recipientes destinados para este fin.
Desde el Segip se explicó que las filas se han incrementado en las últimas dos semanas, debido a la época de vacaciones escolares. Pero, cabe resaltar que a dos días de haberse reiniciado las labores en los colegios, las largas filas continúan.
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Después de la espera...
Una vez dentro, el proceso es sencillo. En cada escritorio hay un funcionario que, una vez recibe los requisitos, procede a la toma de la fotografía y posteriormente, a la entrega del documento.
Leandro salió con su carné de identidad cinco horas después de haber comenzado el trámite, periodo de tiempo que consideró "exagerado". Moviendo los hombros hacia arriba y levantando las manos, no le quedó más que aceptar el moroso proceso con un: "Ni modo, es lo que hay que esperar".
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