Lo dice la auditoría del Sedes. Asambleísta del MAS pide otra auditoría

El Deber logo
26 de julio de 2018, 4:00 AM
26 de julio de 2018, 4:00 AM

La auditoría médica, realizada por el Servicio Departamental de Salud (Sedes) en el hospital Japonés para investigar la muerte de dos personas durante el apagón ocurrido el 9 de este mes, concluyó que los decesos no tienen relación con el corte de energía eléctrica, sino que se debió a fallas multiorgánicas debido a los cuadros crónicos de las víctimas, informó ayer el secretario de Salud de la Gobernación de Santa Cruz, Óscar Urenda.

No obstante, el asambleísta del MAS Johnny Morató, que siguió de cerca el caso, pide que una entidad imparcial realice una nueva auditoría, ya que el Sedes depende de la Gobernación.

“El informe basado en evidencias y en los informes forenses, que se utilizan en estos casos, determinan que los fallecimientos no tienen relación con el corte de energía eléctrica”, indicó Urenda, al agregar que dicha investigación ratifica lo manifestado por la Gobernación, tras el incidente, “ya que en el momento del corte había más de 30 pacientes conectados a respiradores y sobrevivieron porque los equipos tienen un sistema de continuidad propio cuando hay corte de energía”, manifestó Urenda.

Lee también:

La auditoría será presentada a las instancias correspondientes, entre ellas al Ministerio Público, que abrió un proceso para investigar las muertes. “Se concluye que ambos fallecimientos, ocurridos en el hospital Japonés el 9 de julio son productos de la evolución de cuadros mórbidos, crónicos de gravedad, que desembocan en un cuadro de shock séptico con la consiguiente falla multiorgánica irreversible, no apreciándose relación alguna existente con el evento adverso, como el corte de energía eléctrica suscitado en esa fecha”, dice el informe de la auditoría.

Morató manifestó que el Sedes depende de la Gobernación, por lo que “los resultados de la auditoría no sorprenden”.