¿Seguir una rutina? Es necesario que en estos días los chicos no descuiden el estudio y que hagan las tareas que tienen que ver con su desarrollo escolar. Además, deben ayudar en casa

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10 de noviembre de 2019, 3:00 AM
10 de noviembre de 2019, 3:00 AM

Alicia Bress Perrogón

Los últimos días cambió la rutina diaria de niños y adultos en Santa Cruz. Las familias se han visto ‘obligadas’ a compartir más tiempo en casa, indica la sicopedagoga Debbie Cronenbold.

 “Digo obligadas porque estamos impedidos voluntariamente a recurrir a recreaciones externas como salidas al cine, restaurantes y otros, por lo que tener a los niños todo el día en casa puede ser abrumador para los padres que, además, tienen que hacer los quehaceres diarios del hogar y atender a sus hijos”, agrega.

Muchos colegios han utilizado las redes sociales para enviar las tareas a fin de que los chicos hagan en casa. No obstante, Cronenbold señala que muchos niños pueden negarse a hacerlas dado que se sienten que están en vacaciones.

La profesora de primaria Gladys Bazán indica que es importante que el tiempo que están en casa sea cronometrado y que los chicos tengan sus horas de estudio, de juegos y de obligaciones como acomodar sus juguetes, su cuarto, sus zapatos, cosas pequeñas que ellos pueden hacer y que es necesario que como padres les enseñen para que aprendan a ser responsables desde chicos.

En ese sentido, las sicopedagogas Nadia Rocabado y Debbie Cronenbold coinciden en que los padres no deben cambiar los hábitos diarios como, la hora de acostarse y de despertar, la toma de alimentos y de aseo diario, así como también el repaso de sus lecciones, especialmente de Matemáticas, dictados y lectura, para los más pequeños, así como también las salidas a jugar con los amigos.

A su vez, la sicopedagoga María Fernanda Roca considera que la educación debería estar basada en competencias, que son uno de los pilares para el desarrollo personal, y más adelante profesional. Es por ello que cree que estos días generan una gran oportunidad a los padres para desarrollar esas competencias en sus hijos.

“Las competencias son entendidas como capacidades generales que posibilitan los ‘haceres’, ‘saberes’ y el ‘poder hacer’ que los niños y niñas manifiestan a lo largo de su desarrollo”, resalta.

Estas, prosigue, tienen un impacto muy significativo en su comportamiento diario de los chicos y, sobre todo, haciéndolos partícipes de la situación actual del país. 

Les propongo hacer un calendario de ‘challengers’ o desafíos, en donde se pondrán en juego muchas competencias y, sobre todo, un aporte a la sociedad y a su autoconocimiento.

Señala que es una manera de entrenarlos bajo una situación real, pero creando una mentalidad de que ellos pueden hacerlo, lograr que los niños den lo mejor de ellos. “El desafío los hace sentir más seguros de ellos mismos y si no saben cómo hacerlo, pueden preguntar a los padres que están con la disponibilidad y el tiempo”, remarca Roca.

Tareas diarias

Cronenbold sugiere que las tareas escolares las realicen después del desayuno, teniendo una cantidad de temas organizados para cada día. Si son dos o más niños, ubicarlos en mesas separadas.

Las tareas diarias no tienen por qué tardar más de una hora. Darles un tiempo límite, no más de 15 minutos por materia, así saben que tienen que hacerlas rápido. Mostrarles que están controlando con cronómetro para que ellos puedan comprobar su tiempo.

Rocabado añade que es bueno que los padres sigan la rutina señalada de una forma constante y sistemática, que establezcan bien los horarios y tiempos de estudios y los cumplan, que ellos se sienten a corregir los trabajos de sus niños, a tomar los temas estudiados y explicar los nuevos. 

En este sentido, deben valerse y aprovisionarse de recursos didácticos que incentiven a los hijos hacer un buen uso del lenguaje.

“Es buena época para corregir la ortografía, la lectura y nivelar en matemáticas, además de generar habilidades manuales, artísticas y la creatividad”, afirma. 

Es importante también, acota Cronenbold, pedirles ayuda para los quehaceres de la casa, regar el jardín, dar de comer a las mascotas, arreglar su cuarto, recoger la ropa, etc. También puede hacer algunas recetas de cocina para que participen, ya sean galletas o algún postre. La tarde pueden dedicarla a la recreación. “Aprovechen de llevarlos a un parque, visitar familiar es o vecinos”, sugiere la sicopedagoga.

Recomienda, también, los juegos de mesa y las dinámicas, que pinten a voluntad, que hagan experimentos sencillos pero novedosos, desarrollen competencias de cualquier tipo como, carreras, adivinanzas, cuentos, cálculo mental, rimas y otras actividades en las que participen los niños del barrio.

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