Planteamiento a Mesa y a Camacho...
Por: Roberto Barbery Anaya
¿Qué es “La Unidad”? Debería ser obvio. Sin embargo, como están las cosas, parece que es una novedad. Una novedad que, en las actuales circunstancias, ya resulta ineludible, y que requiere tener nombres, en vez de insistir en el desgaste de hacer exhortaciones a la nada…
“La Unidad” no es otra cosa que Carlos Mesa y Luis Fernando Camacho. Así de claro. Todo lo demás se tendría que reordenar en torno a esa “Unidad”. Por ejemplo, no es aventurado conjeturar que un votante potencial de Samuel Doria Medina, se diluye en el espacio de Mesa, que tiene mejores posibilidades electorales; algo parecido se puede pensar de un votante potencial de Jorge Quiroga: se diluye en el espacio de Camacho… En este contexto, solo faltaría convocar al candidato medieval de bandera religiosa, que se vería obligado a dejar el fariseísmo, definiendo de una vez por todas si quiere ser aliado del anti republicanismo o formar parte de La Unidad…
En otros términos aún más directos, el planteamiento es a Carlos Mesa y a Luis Fernando Camacho. Si Ustedes consideran, con razones legítimas, que son los principales gestores políticos de este momento crucial, deben asumir la responsabilidad que eso implica; no es fácil en ningún escenario de la Vida burlar un orden filosófico, sin pagar las consecuencias: todo derecho trae aparejado deberes… Si Ustedes son los principales gestores políticos de este momento crucial, son (y serán para La Historia, que se escribe con iniciales mayúsculas, cuando se refiere a los destinos colectivos de los pueblos, no singulares de los individuos…) también los principales responsables de la unidad o de la falta de unidad, según sea el caso…
El comienzo de la “negociación” (vocablo de uso prestado de la Economía, que no es muy afortunado) para conformar un “Frente Amplio (FA)”, tendría que reconocer “el bien mayor”: la derrota del adversario común. En realidad, ese es el origen concreto de La Unidad, asumiendo que se comparten valores democráticos. Definido “el bien mayor”, se tendría que reconocer que “el bien menor” es que uno de Ustedes sea Candidato a la Presidencia y otro Candidato a la Vicepresidencia…
La antítesis es permitir la aberración de que el rival político se vea nítidamente beneficiado por la desunión, como ocurre hasta ahora, llegando al extremo paradójico de desvirtuar la gesta de 21 días, que solo fue posible gracias a la exposición sin cálculos de millones de ciudadanas y de ciudadanos…
