En la localidad de San Matías se cambió el punto de inscripción hasta San Ignacio de Velasco. Las personas esperaron hasta la última hora para anotarse

27 de enero de 2020, 6:43 AM
27 de enero de 2020, 6:43 AM

Apuro, largas colas y hasta el traslado de recintos, se registraron en el último día del empadronamiento electoral. Jóvenes que cumplían la mayoría de edad y gente que cambió de domicilio fueron los que desde temprano llegaron a los puntos habilitados para poder inscribirse para las próximas elecciones del 3 de mayo.

En Santa Cruz se habilitaron 85 centros, tanto en el área urbana como rural.

Según cálculos del Tribunal Departamental Electoral (TED) se prevé que el número de registrados supere las 50.000 personas.

A escala nacional se habilitaron 700 puntos. En una evaluación general, el presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Salvador Romero, informó que, desde el 18 de enero, cuando comenzó el empadronamiento, a la fecha se registraron 100.000 nuevos inscritos al padrón electoral con miras al proceso de mayo.

“Tenemos registradas 100.000 personas que se inscribieron por primera vez en el padrón electoral y alrededor de 170.000 que cambiaron de domicilio”, dijo Romero.

En Santa Cruz la gran afluencia de personas para empadronarse hizo que el TED habilite otro punto en el barrio Santa Rosita, ubicado en la zona oeste, entre segundo y tercer anillo de la avenida Piraí.

Por otro lado, se registraron problemas en San Matías, en donde más de un centenar de personas se quedaron sin ser inscritos en el padrón biométrico.

Los responsables de hacer el registro en este municipio colocaron un letrero informando que la comisión se trasladaría a San Ignacio de Velasco, a 315 km y siete horas de viaje desde San Matías, debido a la poca afluencia de personas.

Por su parte, Carla Andrea Carreño presidenta del Comité impulsor de Frontera, calificó como una burla este hecho.

La alcaldía de este municipio informó que solicitará al TED, una ampliación al registro.

Bolivia vivirá un nuevo proceso electoral luego de la anulación de las anteriores elecciones, que se realizaron el 20 de octubre de 2019, debido a denuncias de fraude que después fue probado tras un informe técnico realizado por la Organización de Estados Americanos (OEA).

Este hecho generó el descontento social de la población. Al calor de la indignación social se vivieron jornadas de protestas y un paro de 21 días en Santa Cruz.

Acorralado por el descontento social, el entonces presidente, y ganador de las polémicas elecciones, Evo Morales renunció, luego se refugió en México para después instalarse con esa misma condición, en Argentina.