Tenía 63 años. Trabajaba en un supermercado. Vivía con su hijo

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8 de abril de 2020, 14:26 PM
8 de abril de 2020, 14:26 PM

Rosauro Hurtado Banegas tenía 63 años. Perdió la lucha contra el coronavirus en Londres. Según Julio, su hermano que también vive en esa ciudad, Rosauro era un hombre fuerte. "Solamente hizo un tratamiento por un problema que tuvo en la mano hace siete años. Fue en España. Pero no fumaba, no era bebedor", cuenta. 

La noticia de la muerte de su hermano le llegó anoche. Estuvo internado desde el 1 de abril. "No lo puedo creer. El hospital tiene toda la tecnología, pero falleció. Esto es serio. Hasta que no te pasa, no te das cuenta que no hay que tomarlo a la ligera. La gente comenta que si toma aceite de peta o cualquier otra cosa, va a aguantar, o dice que es inmune. No es así". 

Julio dirige sus palabras a la comunidad de bolivianos en Londres: "Ojalá que con este caso tomen conciencia. Aquí se tiene más conciencia que en Bolivia,  pero hay residentes que tienen que tomar esto como alerta", dice. 

No ha podido ir al hospital Lewisham, donde su hermano estuvo intubado y con respirador. Una carta del hospital certifica que llegó el 1 de abril con fallo respiratorio, y que, "si sobrevive, no podrá asistir al trabajo dentro de seis o 12 semanas". 

Esa carta fue enviada a EL DEBER por Silvio Sosa, amigo de Julio. Sosa asegura que hay otros bolivianos internados en centros de salud de Londres y varios que están resistiendo al virus en sus casas

La carta del hospital manifiesta preocupación por el hijo con el que Rosauro compartía vivienda y lugar de trabajo. Recomienda el aislamiento por dos semanas. "Le dije a mi sobrino que se aísle y que esté en contacto con el número 111, que es un teléfono desde donde van diciendo qué hacer", comenta Julio. 

El hospital se encargará de la cremación. "No hay posibilidad de elegir", dice. Una tercera persona que vivía en el mismo lugar también tendrá que aislarse, "porque es casi seguro que hubo contagio", cuenta Julio. "El corazón tira para allá, pero es mejor no ir, porque uno puede traer el virus a otra gente". Julio vive en un barrio diferente al de su hermano.