A las puertas de la novena semana desde que se registró el primer caso, los infectados superan los 16.000, mientras que los fallecidos suman casi 230, lejos de los pronósticos que alertaban sobre miles de contagiados a esta fecha

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30 de abril de 2020, 17:03 PM
30 de abril de 2020, 17:03 PM

Chile celebra con cautela haber alcanzado una "meseta" de contagios de coronavirus en el periodo que preveía un peak de la pandemia que ha logrado contener imponiendo cuarentenas "selectivas" y realizando una gran cantidad de exámenes, entre los índices más altos de detección en América Latina.

A las puertas de la novena semana desde que se registró el primer caso, los infectados superan los 16.000 en Chile, mientras que los fallecidos suman casi 230, lejos de los pronósticos que alertaban sobre miles de contagiados a esta fecha que coincide con el inicio del otoño austral.

"Estamos en una nueva etapa. Hubo un periodo creciente (de contagios) y hoy estamos en una meseta con altibajos y esperamos que la próxima etapa sea cuando el número enfermos activos empiece a disminuir", reconoció esta semana el presidente Sebastián Piñera.

¿Cuál es la estrategia de Chile? 

Chile fue uno de los primeros países de América Latina en decretar -el 7 de febrero- un alerta sanitaria debido al nuevo coronavirus, lo que le permitió comprar insumos: test, respiradores y camas de cuidados intensivos, además de decidir la centralización del sistema de salud.

En una decisión inicialmente rechazada por la población, se optó por decretar cuarentenas selectivas por comunas y/o provincias.

Entre las medidas tomadas con menos de 100 casos de contagios y ningún muerto la segunda quincena de marzo, se cerraron las fronteras, decretaron toque de queda nocturno, suspendieron las clases, ordenaron aislamiento social y se clausuraron los centros comerciales así como todos los eventos masivos.

Cuando las imágenes y cifras de Italia y España conmovían al mundo a mediados de marzo, Chile decidió aumentar la capacidad de testeo, que hoy lo ubican como uno de los países que más exámenes realiza por millón de habitantes en América Latina, con más de 180.500 test PCR (con muestras tomadas con hisopo en la faringe) en total hasta este jueves.

Sin embargo, la cifra todavía está lejos del promedio de la OCDE: 8,1 por 1.000 habitantes el 27 de abril.

Si en febrero solo un laboratorio procesaba muestras, hoy son 65, entre públicos y privados, sumando también una red de laboratorios universitarios que se reconvirtieron en centros de diagnóstico para aumentar la capacidad de pruebas.

En total, son 21 los centros certificados en todo el país, con una capacidad máxima para procesar hasta 3.000 exámenes diarios.

Pero para el retorno seguro de las actividades la cantidad de exámenes debería ser aún mayor de los que se realizan hasta ahora, con un promedio de unos 5.000 test por día.

Con cifras controladas, tonos triunfalistas entre las autoridades y pánico por la caída económica, han empezado a darse señales para recuperar la actividad con la apertura de algunos centros comerciales y regreso a las oficinas de los funcionarios públicos, pero no se vislumbra aún el retorno a clases.