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Breve explicación del estado de la industria petrolera

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16 de mayo de 2020, 3:00 AM
16 de mayo de 2020, 3:00 AM

Por: Ricardo Vásquez, experto en hidrocarburos

En un análisis de las causas del desplome de los precios del petróleo en el mundo y lo que acarrea este efecto seria bueno puntualizar los siguientes argumentos para entender que paso y luego, como saldrá el mundo de este colapso.

¿Que paso?

1.    En Marzo de 2020 se inicio una guerra por el control del precio del petróleo, protagonizada por Arabia Saudita y Rusia. Arabia Saudita es el mayor exportador de petróleo del mundo y líder no declarado de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Tiene capacidad para producir más de 12 millones de barriles diarios, lo que le permite aumentar o reducir su producción con mayor facilidad que otros países. Luego de una caída de los precios que se inició en 2014, a finales de 2016 se creó un grupo conocido como OPEP +, que reúne a países miembros de esa organización junto a otros productores entre los que destaca Rusia (tercer productor mundial), con el fin de coordinar recortes que permitieran recuperar los precios. La estrategia funcionó y se fue alargando hasta marzo de 2020, cuando una propuesta de recortes de producción adicionales para hacer frente a los retos planteados por el Covid-19 fue rechazada por Moscú. La idea fue realizar un recorte de 1,5 millones de barriles diarios (reducción del 3,6% del total de producción mundial), de los cuales se esperaba que 500.000 barriles fueran sacrificados por los países no afiliados a la OPEP, a lo que Rusia se negó y en respuesta, Arabia Saudita incremento su producción e incluso llego a ofrecer descuentos a sus compradores en Europa, provocando el primer colapso, que luego se subsano a mediados de Abril, con un acuerdo para reducir la producción mundial en 10 MMBPD…un poco tarde, cuando ya se tenia la pandemia activa.

2.    En el análisis de la demanda y oferta de petróleo a nivel mundial, podemos hacer el siguiente análisis: Con un equilibrio en torno a los 100 millones de barriles por día (MMBPD), una variación de 2% (2 MMBPD) provoca una variación arriba o abajo en el precio, al no haber una acuerdo inicial entre Arabia Saudita y Rusia en la guerra anteriormente descrita, Arabia Saudita subió su producción en 4 MMBPD para “escarmentar” a los rusos, lo que provoco la primera caída desde los 60 $us por barril a principios de 2020 hasta alcanzar el margen de 30 – 35 $us por barril.

3.    Mientras se desarrollaba este tire y afloja entre los grandes productores, vino la pandemia del Covid-19 que provoco el desmoronamiento del consumo a nivel mundial al estar un 90% de los habitantes en cuarentena, con fabricas cerradas, vuelos suspendidos y vehículos estacionados en las casas ante las prohibiciones de circulación, lo que redujo 30 MMBPD la demanda que ya estaba sobre ofertada con 4 MMBPD.

4.    Los depósitos de almacenamiento, refinerías, ductos, barcos de carga, etc. se vieron colapsados en su capacidad debido a la casi nula demanda y provoco el otro colapso y la caída en el precio a niveles negativos.


¿Que pasará?
Aunque nadie se anima con exactitud a predecir como se comportara el mercado, los siguientes datos pueden ser interesantes de analizar antes de formarse una opinión:

1.    Los stocks almacenados mantendrán un precio bajo por un periodo adicional, en el cual el mundo retornara a la “nueva realidad” después del final del confinamiento del Covid-19, empiecen las fabricas e industrias a operar nuevamente (con las restricciones acarreadas para evitar la “segunda ola” muy probable), los vuelos vuelvan a operar y los vehículos a transitar, hasta lograr un nuevo punto de equilibrio (que seguramente no serán los 100 MMBPD)

2.    La industria del petróleo deberá reinventarse para tratar de ser mas competitiva, se deberán analizar formas de mejorar los rendimientos y reducir costos innecesarios, que ojalá no lleven a flexibilizar o relajar las medidas de seguridad que puedan ocasionar accidentes con perdidas de vida y daños ambientales que compliquen más aun la situación, de por si inestable.

3.    Los gobiernos que dependen de las rentas y ventas de recursos naturales y petróleo y gas, deberán flexibilizar también sus esquemas de impuestos y rentas a la industria y tratar de adaptar o crear nuevas formas de incentivos que inviten a las multinacionales a invertir con seguridad jurídica compartiendo el riesgo y también las ganancias generadas.

4.    La utilización de técnicas de recuperación mejorada como el fracking en proyectos no convencionales (Vaca Muerta, por ejemplo), será imposible de reanudar operaciones hasta alcanzar por lo menos un precio de 60 – 70 $us por barril. Estos proyectos, en los cuales en Estados Unidos han debido cerrar las válvulas ante la imposibilidad de continuar almacenando la producción, necesitarán realizar trabajos de reparación en sus pozos (sobre todo el los de shale oil) ya que el hecho de cerrarlos ha provocado daños en el sistema de producción al quedar el petróleo estático a niveles superficiales y con baja temperatura, deberán limpiar las líneas de completación

5.    Se estima que entre 200 y 500 compañías petroleras (operadoras y de servicios) se declararan en bancarrota debido a la crisis, lo que acarreara un desempleo de mas de 1 millón de empleados en el mundo en toda la cadena (exploración – producción – refinación y ventas)

6.    Las estimaciones actuales nos indican (sin que haya terminado la cuarentena del Covid-19) que la “nueva normalidad” estará llegando aproximadamente en diciembre del 2021 con un equilibrio de 91 MMBPD y un precio de 75 U$ por barril, hasta ahí, solo quedará reinventarse y asumir que lo peor ya paso.

7.    Lo expuesto en el punto 4 puede poner a Bolivia en una posición privilegiada pues Argentina verá nuevamente afectada su producción, al ser no rentable la explotación de sus campos no convencionales, dependerá del Estado boliviano la capacidad de incrementar su producción, ya sea mediante la exploración u optimización de producción de los campos actuales, sumado a los incentivos a las operadoras actuales.

8.    Otro punto a favor, esta vez para la industria en del petróleo en general, es que con esta caída de precios, que no variará agresivamente en mi opinion, de no producirse una guerra (que en algún momento lo veo muy probable), limitará los esfuerzos en la investigación de energías alternativas, al ser estas muchísimos mas caras y ahora con un barril WTI llegando a 50 $us por barril el próximo año, será casi imposible competir con el petróleo. Lo siento por los ecologistas, deben nomas tener un poquito de realidad y trabajar muy fuerte, esta industria esta para quedarse por largo tiempo.
 

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