El ministro de Defensa niega sobreprecio en la adquisición de gases lacrimógenos. Asegura que el narcotráfico y el terrorismo son males latentes en el país, que deben ser enfrentados con equipamiento

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4 de junio de 2020, 11:11 AM
4 de junio de 2020, 11:11 AM

El ministro de Defensa, Fernando López, negó enfáticamente este jueves que exista sobreprecio en la adquisición, mediante un intermediario, de gases lacrimógenos. Aseguró que firmaría “una y mil veces” contratos para equipar a las Fuerzas Armadas (FFAA) y a la Policía Boliviana frente a dos males que consideró latentes en el país, el narcotráfico y el terrorismo.

“Si tengo que firmar nuevamente muchos contratos para equipar a las FFAA o a la Policía Boliviana, lo voy a hacer una y mil veces, porque nuestro rol es pacificar el país. No podemos defender al país si no tenemos la estructura operativa adecuada”, expresó la autoridad en conferencia de prensa.

Un medio de comunicación denunció la existencia de presuntas irregularidades en la compra del implemento no letal, en diciembre de 2019, a través de una intermediaria, la compañía Bravo Tactical Solutions LLC, establecida en Miami, EEUU; sin embargo, López explicó que el fabricante, International Manager-Americas, Cóndor S/A industria química, no realiza ventas directas y delega representantes para cada país.

“No es delito estar preparados para luchar contra el narcotráfico, no es delito, por el contrario, la pacificación del país se debe gracias a la acción de la Policía y de las FFAA, que deben, tienen y están en la obligación de estar en todas las condiciones para poder enfrentar algo que es real en nuestro país, el narcotráfico y el terrorismo. Eso no va a cambiar, seguimos firmes, entrenando y en apronte”, agregó.

La conferencia de prensa:


El Gobierno presentó anoche a EL DEBER cuatro documentos para sostener que no hubo intermediarios ni sobreprecio en la compra de cartuchos de gases lacrimógenos realizada por el Ministerio de Defensa. Además, precisó que uno de los documentos presentados en la denuncia es fraguado, por lo que pedirá que se realicen pericias para determinar si se utilizó un instrumento falsificado.

“Se garantiza la libre expresión de todo el pueblo boliviano y el trabajo de la prensa. No hay absolutamente nada en este Gobierno que entorpezca su trabajo. No hay ninguna instrucción de que se investigue a nadie, es más, están (los periodistas) en la obligación de hacer seguimiento e investigar. No cometan errores, si van a investigar, vengan con cosas concretas y fidedignas”, agregó el ministro, ante el “repliegue” del comunicador que realizó la denuncia pública del caso.