El 90% de los donantes de plasma en Santa Cruz llega por gestiones de familiares de los enfermos
El porcentaje de donación voluntaria sin algún requerimiento de por medio sigue siendo bajo. Hasta el 4 de junio 18 personas se presentaron y el Banco Regional de Sangre tiene por el momento cinco solicitudes pendientes
Foto: Fuad Landívar
"Estamos siendo poco solidarios y me apena porque hay muchas personas que están requiriendo plasma. Es necesario que la gente sepa que los pacientes Covid-19 mejoran, para que así se animen a donar", exhortó Yitzhak Leigue, director del Banco Regional de Sangre, de Santa Cruz.
Hasta la fecha, 18 personas se han presentado a donar plasma hiperinmune, tratamiento para los casos más delicados, que logra salvarlos de entrar al estado crítico. "Debe ser en un momento temprano, porque cuando el paciente está muy crítico, ya no sirve", aclaró el especialista.
La mayoría de los donantes logró aportar hasta con dos dosis de plasma y, los más grandes, incluso tres. Leigue dijo que en redes sociales se ven muchos requerimientos, algunos de ellos de otros bancos de sangre, como de la Caja Petrolera y Caja Nacional de Salud, pero que hasta el jueves 4 de junio, el Banco Regional tenía cinco solicitudes pendientes, que debían ser cubiertas hasta el viernes 5, casi todas de los grupos O y A+.
"Han llegado pocos voluntarios, pero han aparecido más donantes traídos por las familias afectadas; igual ayuda, pero lo ideal es que haya más voluntarios para guardar un stock y que haya una cierta cantidad disponible, de tal modo que no se tenga que esperar cuando se necesite. Un 90% de las personas que donan, acuden porque la familia del paciente las trae, y un 10% son las que llamamos nosotros. Esperemos que se cambie esa tendencia", reflexionó.
La venta de sangre y plasma es ilegal
En momentos de desesperación, muchos de los familiares que publican sus pedidos de plasma en las redes sociales ofrecen remuneración, pero no es legal. Incluso algunos de ellos acuden a la puerta del Banco Regional de Sangre para tentar a los donantes.
La Ley de Medicina Transfusional 1687, en su artículo 18, desde hace más de 20 años prohíbe la venta de sangre y sus componentes. Cuando el personal del Banco de Sangre detecta una compra-venta, automáticamente rechaza al donante para siempre y sus datos entran al sistema. Además, tienen la potestad de denunciar el caso a la Policía.
La autoridad del Banco Regional dice que no puede lucrarse con eso, "sería triste, porque solo se verían beneficiadas las personas que tienen dinero, y las de menos recursos mueren. Nosotros nos guiamos por la gravedad del caso y por el orden en que llega cada emergencia", explica Leigue.
