A última hora, el juez Alan Zarate comunicó su decisión a la defensa que considera exagerado el monto de la garantía

18 de junio de 2020, 22:17 PM
18 de junio de 2020, 22:17 PM

Finalmente, el ex ministro de Gobierno, Carlos Romero, logró la detención domiciliaria que había buscado su defensa; pero su pretensión está condicionada a un depósito de 350.000 bolivianos como fianza que impuso el juez Alan Zarate, en un fallo de cinco páginas.


Detención domiciliaria, fianza económica de Bs 350.000, arraigo, prohibición de comunicarse con las personas involucradas, prohibición de acercarse al Ministerio de Gobierno y todas sus entidades, presentarse cada 15 días en a la Fiscalía, esas son las seis medidas que dispuso el juez anticorrupción.


La audiencia de cesación a la detención, se truncó en horas de la tarde por un supuesto corte de energía eléctrica en el penal de San Pedro, la sesión se llevaba adelante a través de la aplicación que dispuso el Tribunal Departamental de Justicia de La Paz para las sesiones virtuales.


En su fallo, el juez disipó las demandas de los fiscales, la parte acusadora y los abogados defensores. Sobre los cinco meses de detención, la autoridad dio razón a la defensa y afirmó que se cumplió el plazo que se había dispuesto en febrero. Carlos Romero está detenido en San Pedro desde el 17 de enero.


Respecto de la enfermedad del acusado, el juez dijo que no presentaron documentación idónea que certifique que Romero está realmente enfermo y de ese modo dio la razón a los fiscales y a la parte acusadora.


Sobre la acusación de ser autor de los delitos de incumplimiento de deberes y uso indebido de influencias, el juez consideró que el hecho de que Romero no haya designado a la directora de la Unidad Estratégica de Lucha Integral Contra el Narcotráfico (Uelicn), no lo hace menos responsable de los hechos irregulares en esa unidad.


El pedido de ampliación de la detención preventiva, de otros cuatro meses, que solicitó la fiscalía fue rechazada por el juez y dijo que no existe riesgo de obstaculización por parte del acusado por la medida de detención domiciliaria a la que estará sujeto.


Por esas consideraciones, Zarate dispuso la detención domiciliaria, pero a cambio de un monto elevado de fianza que fue observado por la defensa y será apelado.