En cinco días, 4.435 personas se vacunaron contra la fiebre amarilla y 3.771 contra la influenza
Se quiere conseguir que las personas que tienen transitabilidad al momento de abastecerse, por el último dígito de su carnet, puedan aprovechar el sistema de salud movilizado para vacunarse contra cuatro enfermedades.
El Servicio Departamental de Salud (Sedes) de Santa Cruz informó este lunes que mañana, 30 de junio, concluirán los primeros cinco días de vacunación contra cuatro enfermedades: influenza, tétanos, fiebre amarilla y sarampión, y que se analizará el inicio de una segunda fase, con ampliación de centros de vacunación.
El director del Sedes-Santa Cruz, Marcelo Ríos, informó que hasta el pasado viernes, 4.435 personas fueron vacunadas contra la fiebre amarilla, 3.771 contra la influenza, 907 contra el tétanos y 68 ciudadanos contra el sarampión.
“Va a ser importante continuar con la estrategia. Se hará una evaluación para ver si amerita realizar un segundo ciclo en los mismos lugares de vacunación (los mercados municipales) o si se amplían los puntos de vacunación”, dijo Ríos.
Según la autoridad, este esquema de vacunación, en su primer ciclo, permite proteger a la población de manera gratuita, estableciendo puntos de vacunación con profesionales sanitarios identificados, en los ingresos de siete de los mercados con bastante afluencia de personas, como el Mutualista, Santa Cruz, Primavera, Villa 1ro de Mayo, antiguo mercado La Ramada, antiguo Los Pozos y Satélite Norte.
En los demás municipios del departamento se está realizando vacunación de manera normal en los centros de salud. “No se ha podido aplicar una estrategia de vacunación casa por casa, por los riesgos que implica la pandemia del Covid-19. Hubo hasta ahora, buena respuesta”, señaló el director del Sedes.
De las 450.000 dosis de vacuna para todo el departamento, en esta primera fase ya se utilizaron más de 68.000. La idea es poder conseguir que las personas que tienen transitabilidad al momento de abastecerse, por el último dígito de su carnet, puedan aprovechar el sistema de salud movilizado para vacunarse contra estas enfermedades.
Las vacunas, especialmente contra la influenza, están dirigidas principalmente a mujeres embarazadas, adultos mayores y personas con enfermedades de base, como diabetes, hipertensión, problemas cardiovasculares, cáncer y otros problemas que le generan una falla en la inmunidad.
