A partir del 1 de julio, el gobierno israelí podría comenzar con su idea de anexionar las zonas de la Cisjordania ocupada. Estos planes ya causaron polémica y una oleada de críticas en el pasado.

30 de junio de 2020, 17:55 PM
30 de junio de 2020, 17:55 PM

En los medios israelíes, la especulación sigue en pleno apogeo. El motivo es si Israel realmente comenzará a anexionar partes de la Cisjordania ocupada. En Ramala, en la Cisjordania ocupada, los palestinos, como Salem Barahmeh, se sienten profundamente frustrados cuando hablan de cómo será un futuro impuesto por otros. "Soy de la generación de Oslo, nos prometieron un Estado y nunca lo obtuvimos", afirma Barahmeh, director del Instituto Palestino de Diplomacia Pública, una organización no gubernamental independiente. "Estamos extremadamente frustrados y enojados, pero también estamos decepcionados de que el mundo no nos esté escuchando. De hecho, nuestro país ha estado poblado durante mucho tiempo y nadie ha hecho nada al respecto", se queja.

A partir del 1 de julio, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, podría comenzar a anexionar hasta el 30 por ciento de la Cisjordania ocupada, según el plan de Oriente Medio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, publicado en enero de 2020. Hasta ahora, sin embargo, solo se ha especulado sobre cuándo y en qué medida tendrá lugar la anexión. El primer ministro israelí habló al principio de la incorporación del Valle del Jordán y de 135 asentamientos que la comunidad internacional consideraba ilegales. Ahora hay informes no confirmados de que Israel inicialmente podría anexionar asentamientos aislados o bloques de asentamientos. Las conversaciones con Washington sobre dichos planes siguen en marcha.

¿Fin de la solución de dos Estados?

"Estamos ante un momento de importancia histórica en esta región", opinó Nickolay Mladenov, coordinador de la ONU para el proceso de paz en Medio Oriente, en declaraciones a periodistas extranjeros en Jerusalén la semana pasada. Mladenov advirtió que la medida unilateral viola el derecho internacional y las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU. También cuestionó la solución de dos Estados.

Los palestinos observan desde hace años cómo va desapareciendo la posibilidad de que se aplique la solución de dos Estados. En una encuesta realizada por el Centro de Medios y Comunicación de Jerusalén (JMCC) y la Fundación Friedrich Ebert, el 45,3 por ciento de los palestinos encuestados opinó que la anexión por parte de Israel difícilmente permitiría esta solución. El concepto ha quedado obsoleto desde hace mucho tiempo para Salem Barahmeh: la Autoridad Nacional Palestina controla de facto solo alrededor del 18 por ciento de la Cisjordania ocupada, la soberanía recae en todos los temas relevantes en Israel. "Israel controla la libertad de movimiento, los recursos hídricos y los servicios. Fuerzas israelíes van a ciudades y pueblos todas las noches para arrestar a personas. Actualmente vivimos en una realidad de un solo Estado, en la que Israel controla todo lo que vive en el área entre el río Jordán y el mar", agrega.

Preocupación entre los palestinos, indiferencia en Israel

Para muchos israelíes, sin embargo, la cuestión de la anexión no juega un papel importante. Están más preocupados por la pandemia actual y la tensa situación económica asociada al coronavirus, según una encuesta realizada por la "Iniciativa de Ginebra" sobre el fin del conflicto en Oriente Medio. Solo una pequeña proporción de los encuestados quiere que para el Gobierno la anexión sea el tema prioritario. Otras encuestas mostraron resultados contradictorios. "Hay una escasa mayoría de israelíes judíos que apoya de alguna forma la anexión, pero no hay consenso sobre cómo debería ésta ser exactamente", afirma Ofer Zalzberg, analista del International Crisis Group.

Adar Keish y Tair Rosenblat pertenecen a Darkenu, uno de los grupos que protesta contra la planeada anexión. Con el lema "No a la anexión, Sí a la economía y la seguridad" buscan apoyos en la sociedad israelí. A Tair le preocupa sobre todo que "no tenemos de momento dinero para realizar planes de anexión". Él perdió su trabajo de mesero por el coronavirus. "Queremos también que la gente del otro lado sea parte del proceso", añade.

Incertidumbre sobre las reacciones internacionales.

En respuesta a los planes de anexión, el liderazgo palestino en Ramala anuló todos los acuerdos con Israel, incluida la coordinación conjunta en materia de seguridad y asuntos civiles. El primer ministro palestino, Mohammed Shtaje, enfatizó que garantizaría la paz y el orden. Su Gobierno está bajo una enorme presión económica: la Autoridad Nacional no pudo recientemente pagar los salarios completos debido a disputas sobre los pagos de impuestos y aduanas, que generalmente se envían mensualmente desde Israel a los palestinos. El brazo militar de Hamás en Gaza calificó cualquier anexión como una "declaración de guerra".

Mientras continúan las conversaciones de alto nivel entre Washington y Jerusalén sobre los detalles de una posible anexión, la Unión Europea aparentemente está esperando para formular una respuesta. En los últimos meses, el jefe de Política Exterior de la UE, Josep Borrell, ha criticado repetidamente que cualquier anexión en la Cisjordania ocupada sería una violación del derecho internacional.