Acsabe envió al Ministerio de Salud la solicitud con las normas de bioseguridad que van a implementar. Solo se atenderá con reserva de horario

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1 de julio de 2020, 11:07 AM
1 de julio de 2020, 11:07 AM

Otro sector golpeado por la crisis sanitaria del coronavirus es el de la belleza. Desde que se inició la cuarentena, hace más de 100 días, las peluquerías cerraron sus puertas para precautelar la salud de sus clientes y de sus trabajadores.

El estilista Javier Delgado cuenta que en su salón de belleza tuvo que prescindir de seis trabajadores, pues dejó de atender por la suspensión de las actividades. "Cada uno de ellos es una familia, a la que mantienen. Al dejar de venir a la peluquería pierden su ingreso económico, lo que es muy grave, pues es su única fuente de sustento", comentó.

Delgado expresó que ya está listo para volver a abrir las puertas de su negocio, con toda la bioseguridad que garantice la protección de sus clientes y de sus trabajadores. Igual seguirá las normas que les piden los gremios de peluqueros a los que pertenece, que crearon el lema Yo te cuido, tú me cuidas.

"Además de que necesitamos trabajar nuestros clientes llaman para pedirnos que los atendamos, hombres y mujeres por igual", contó el estilista. 

María Elena Salazar, presidenta de la Asociación Cruceña de Salones de Belleza (Acsabe), manifestó que han pedido al Ministerio de Salud la autorización para abrir las puertas de las peluquerías, siguiendo normas de bioseguridad que fueron aprobadas por el Servicio Departamental de Salud (SEDES).

"Nos hemos capacitado para atender en el marco de la nueva normalidad. Tenemos los implementos de bioseguridad listos", dijo la titular de Acsabe.

Por su parte, Tatiana Limpias, gerenta de Promociones Gloria, contó que el salón de belleza de su empresa es amplio y que podrán cumplir el distanciamiento social y todos los protocolos de bioseguridad.

Nueva normalidad en las peluquerías

La atención se realizará solo con reserva, que se deberá hacer vía telefónica u online.

Para ingresar a la peluquería el cliente deberá llevar barbijo, caso contrario no será atendido.

En la puerta habrá una bandeja desinfectante de zapatos. También se le proporcionará alcohol en gel para las manos.

Los asientos de espera tendrán al menos un metro y medio de distanciamiento entre sí, aunque la administración del salón verá que no se junten más de tres clientes al mismo tiempo para ser atendidos.

Todos los asientos de atención serán desinfectados tras cada cliente. Además, tendrán una distancia de un metro y medio entre uno y otro.



Igualmente todos los implementos de trabajo, como peines, cepillos, tijeras, secadoras, pinzas y otros, serán debidamente desinfectados. Antes de la cuarentena ya lo hacían, pero ahora lo harán con más rigor.

Cuando el cliente requiera alcohol en gel o toallas desechables las tendrá inmediatamente.

Todo el personal del salón de belleza, desde quien abre la puerta, el que atiende en la recepción y los estilistas usarán barbijos y delantal de bioseguridad.

La peluquería será desinfectada al menos tres veces al día, en la mañana, en la tarde y en la noche, con material calificado para limpiar pisos, asientos y mesones.



También habrá señalética que indicará los lugares que se pueden ocupar, por dónde caminar y los que indican los espacios habilitados para la atención.

Nace una nueva entidad

Con el propósito de que los represente en un contexto empresarial y profesional se está formando la Cámara de Salones de Belleza y Spa, manifestó la estilista Mary Lizzie Ortiz. Esta nueva entidad velará por los derechos de las entidades del rubro y  la actualización y capacitación permanente de sus asociados.

Esta Cámara también solo espera la autorización gubernamental para empezar a trabajar en el área de la belleza.