"El nuevo sistema de asilo se ha concebido para deportar a las personas en vez de ofrecerles seguridad y protección", denuncian en un comunicado Oxfam y el Consejo griego para los refugiados

2 de julio de 2020, 5:53 AM
2 de julio de 2020, 5:53 AM

Oxfam criticó la nueva ley de asilo votada recientemente en Grecia, porque según la oenegé genera "maltrato" y "explotación de las personas" y es un "ataque flagrante al compromiso humanitario de Europa de proteger a quienes huyen de la persecución y los conflictos".

"El nuevo sistema de asilo se ha concebido para deportar a las personas en vez de ofrecerles seguridad y protección", denuncian en un comunicado Oxfam y el Consejo griego para los refugiados, una oenegé dependiente de la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur).

"Esto significa que las personas que huyen de la violencia y la persecución tienen pocas posibilidades de obtener un procedimiento de asilo justo, y que las familias con niños son retenidas regularmente en condiciones inhumanas", añaden estas ONG.

Entre las prioridades del gobierno conservador griego de Kyriakos Mitsotakis, en el poder desde hace un año, figura reducir el número de migrantes y refugiados que llegan al territorio griego desde la vecina Turquía. 

Después de la crisis migratoria de 2015, Grecia volvió a ser en 2019 la principal puerta de entrada a Europa para los solicitantes de asilo.

El gobierno decidió endurecer su política migratoria acelerando los procedimientos de asilo, pese a los derechos de los refugiados, o reduciendo su acceso a los servicios sanitarios o de ayuda jurídica.

En un informe publicado este jueves, las dos oenegés explican cómo la reforma de la legislación sobre el asilo en Grecia, en vigor desde el 1 de enero y enmendada en mayo, "expone a las personas al maltrato y a la explotación".

"Esta situación se agrava debido a las condiciones de vida inhumanas en los campamentos superpoblados en Grecia donde las personas están confrontadas a una crisis sanitaria si el Covid-19 surge en ellos", explica el texto.

Evelien van Roemburg, directora de la campaña migratoria de Oxfam en Europa, estimó que "la nueva ley en Grecia es un ataque flagrante al compromiso de Europa de proteger a las personas que huyen de los conflictos y de la persecución".

Según ella, "la Unión Europea es cómplice de este abuso porque ha utilizado a Grecia como laboratorio de ensayo para nuevas políticas" de asilo.

"Estamos muy preocupados porque este sistema de asilo (griego) podría servir de patrón para la reforma de la política de asilo prevista próximamente en Europa", subrayó.

Más de 33.000 solicitantes de asilo viven en campamentos sórdidos en cinco islas del mar Egeo, con capacidad para solo 5.400 personas. Y alrededor de 70.000 están hacinados en otras instalaciones en Grecia continental.