El Gobierno afirmó que la mandataria boliviana no fue desairada por su par de Argentina durante la reunión del Mercosur. La Cancillería dijo a EL DEBER que las relaciones con Argentina “son normales”

3 de julio de 2020, 19:58 PM
3 de julio de 2020, 19:58 PM

La Cancillería de Bolivia aclaró que la presidenta del Estado, Jeanine Áñez, no fue desairada por el presidente de Argentina, Alberto Fernández, durante la cumbre del Mercosur, que se llevó a cabo de manera virtual, en la jornada de jueves.

En algunos medios digitales y redes sociales se habló que el argentino no quiso escuchar a la boliviana porque supuestamente considera que es un gobierno de facto. En la importante cita de presidentes del continente, Fernández, apagó su monitor y salió de la reunión, justo antes de la intervención de Áñez.

Karen Longaric Rodríguez, canciller del Estado boliviano, puso paños fríos a la situación e indicó a EL DEBER este viernes que no amerita mayores comentarios el episodio, porque según ella las relaciones con argentina “son normales”.

“La verdad que no hubo tal “portazo virtual” como dice en un comunicado que sacamos porque el presidente de Argentina no volvió más a la reunión”, indicó. Es más, la autoridad boliviana destacó el discurso de Fernández, señalando que el argentino habló de integración e interrelaciones entre países del Mercosur.

Longaric Rodríguez añadió que el Gobierno nacional siempre buscará la unidad con todos los mandatarios de Estado, porque considera que son importantes para el desarrollo de la región.

Áñez saludó al presidente Argentino sin estar presente

En su participación, la mandataria boliviana saludó a todos los presidentes, incluido a su par argentino, donde ratificó que las fechas de las elecciones generales en Bolivia serán el 6 de septiembre.

En el encuentro, los integrantes del Mercosur destacaron la importancia de trabajar en una agenda que establezca políticas públicas para el desarrollo sostenible en sus tres dimensiones: económica, social y ambiental.

 Mirada política al incidente  

La diputada por Unidad Demócrata (UD) y vicepresidenta de la Brigada Parlamentaria de Tarija, Lorena Gareca, consideró que la relación bilateral aún no se ha deteriorado y que la actitud del presidente Alberto Fernández fue una acción emocional que derivó en un desaire hacia la presidenta Jeanine Áñez.

“Con su prepotencia, el mandatario argentino ha faltado el respeto no solo a la presidenta, sino también al pueblo boliviano que de exigir una disculpa no será suficiente”, declaró la parlamentaria.

Para el asambleísta de Camino al Cambio (CC) y aliado de la agrupación Creemos, Mauricio Lea Plaza, indicó que, por su inclinación ideológica a favor de Evo Morales, a quien dio refugio en la Argentina, le hizo cometer un acto bochornoso en el ámbito diplomático y ofensivo hacia la relación de ambos países.

El gobierno de Alberto Fernández no reconoce al de Jeanine Áñez, por considerar que asumió tras un golpe de Estado contra Morales, cuando la sucesión en Bolivia fue avalada por el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) por la ausencia y abandono de función del expresidente.