Por primera vez, la misión de la agencia espacial estadounidense tiene el objetivo explícito de encontrar rastros de vida antigua en el planeta rojo, recogiendo durante varios años una treintena de muestras de rocas

18 de febrero de 2021, 7:38 AM
18 de febrero de 2021, 7:38 AM

Siete meses de viaje espacial, décadas de trabajo y miles de millones de dólares invertidos para responder una sola pregunta: ¿existió alguna vez vida en otro lugar que no fuera la Tierra? La NASA trata de responder a esta cuestión con el aterrizaje el jueves de su último rover, el Perseverance.

Por primera vez, la misión de la agencia espacial estadounidense tiene el objetivo explícito de encontrar rastros de vida antigua en el planeta rojo, recogiendo durante varios años una treintena de muestras de rocas.

Estas se traerán a la Tierra en una misión planificada para la década de 2030 para ser analizadas, y quizás finalmente poder responder a "una de las preguntas que nos han acompañado durante siglos, a saber, ¿estamos solos en el Universo?", dijo el miércoles Thomas Zurbuchen, administrador asociado de ciencia de la NASA.

Perseverance es el vehículo más grande y complejo jamás enviado a Marte. Construido en el Jet Propulsion Laboratory, en California, pesa una tonelada y está equipado con un brazo robótico de más de dos metros y 19 cámaras.

La misión llevará a cabo una maniobra muy peligrosa el jueves, en el sitio de aterrizaje más arriesgado jamás intentado, debido a su relieve: el cráter Jezero.

Poco después de las 16:30 (hora boliviana), entrará en la atmósfera de Marte a una velocidad de 20.000 km/h protegido por su escudo térmico que se activará tras la apertura de un enorme paracaídas supersónico. Ocho motores que apuntarán al suelo lo frenarán y entonces sus seis ruedas descenderán, sostenidas por cables, hasta tocar tierra.

"El cielo parece despejado para aterrizar mañana. Pero incluso con cielo despejado, aterrizar es la parte más peligrosa de la misión, y no podemos garantizar su éxito", recordó en conferencia de prensa Allen Chen, responsable del descenso.

Si Perseverance llega intacto, las primeras imágenes podrían transmitirse poco después.

Perseverance, si consigue aterrizar, será el quinto vehículo en posarse en suelo marciano. Desde el primero, en 1997, todos han sido estadounidenses, y uno de ellos, Curiosity, sigue con su misión en el planeta.

China colocó recientemente en la órbita de Marte su sonda "Tianwen-1", que contiene un robot que se espera intente aterrizar alrededor de mayo.