Observan que el mensaje de Arce Catacora sirve para bajar el tono de las tensiones políticas

El mensaje del presidente Luis Arce, con el que anunció la vacunación masiva contra el Covid-19 a las personas mayores de 18 años, ganó adhesiones y aminoró las señales de la tensión política que se instalaron en el país por efecto de los procesos judiciales contra exautoridades de la oposición.

Hace unos días, la alcaldesa de El Alto, Eva Copa, le reclamó al Gobierno por los recursos que se recaudan en la autopista y el peaje del aeropuerto internacional que está en su municipio. Ayer, la autoridad destacó la necesidad de ampliar la campaña de vacunación y anticipó un trabajo conjunto con el Ejecutivo. 

“Hay que ayudar al Gobierno, al ministro de Salud, Jeyson Auza, para trabajar juntos y ver alguna iniciativa para apoyar la vacunación”. La autoridad lamentó que las campañas de desinformación afecten las iniciativas de inmunización y dejó abierta la posibilidad de aplicar incentivos, incluso con rebaja de tributos, en favor de las personas que sean inoculadas. “Es un proyecto que estamos socializando”.

A esta adhesión se sumó la del presidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (Cepb), Luis Barbery, quien aseguró que la medida anunciada por Arce el miércoles por la noche estaba siendo esperada por el sector para aliviar las tensiones económicas y proyectar la reactivación con mayor certidumbre.

“Esto es muy importante porque sin un proceso de reducción de los contagios no se puede pensar en una reactivación de la economía ni en la reducción de la pérdida de fuentes de empleo. Tenemos que luchar para revertir una tendencia negativa y este es el paso clave que tenía que haberse dado”, afirmó el empresario.

En un mensaje de casi 17 minutos, emitido cerca de las 22:00 del miércoles, el presidente Arce señaló que por efecto de la pandemia, se duplicaron los indicadores de desempleo, mientras que la pobreza extrema subió casi un punto porcentual. “Cuando un hecho de crisis alcanza a una sociedad sólo el Estado puede proteger a su pueblo”, apostilló el mandatario y anunció un proyecto de ley para dotar de más recursos a los gobiernos subnacionales.

El presidente también anunció la llegada de un lote de 6 millones de vacuna Sinopharm (China) que estarán en Bolivia entre julio y agosto. “El país va a poder contar con esta cantidad que son imprescindibles para acelerar el proceso de vacunación masiva a nivel nacional”, remarcó.

“Este anuncio no es un tema menor, se da en un momento en el que la escasez de vacunas está afectando al mundo y le sirve a Luis Arce para aminorar las preocupaciones económicas y a distender esa discusión política fuerte que hay en estos días sobre el golpe y fraude”, sostuvo el politólogo Marcelo Arequipa.

De hecho, el diputado Juanito Angulo (MAS) afirmó que “estos son tiempos para destacar la estrategia contra la pandemia”.

En esa línea, el canciller Rogelio Mayta afirmó que las acciones anunciadas por Arce “deben superar las limitaciones políticas”. “Hay que despojarse de colores políticos y tenemos que luchar todos para reestablecer la salud de los bolivianos. No valen las acusaciones”, señaló el jefe de la diplomacia tras ser consultado respecto a las críticas de sectores de la oposición referidas a la gestión gubernamental de vacunas y la atención de la pandemia.

El plan de vacunación, junto con la política de diagnóstico del Covid 19, fue criticado por actores de la oposición, que pidieron al gobierno un acuerdo para permitir la reactivación con paz social.

El diputado Erick Morón, de la alianza Creemos, afirmó que “Arce está en la línea correcta con la masificación de las vacunas”, pero expresó sus dudas sobre la llegada de las dosis en los términos anunciados por el Gobierno. Recordó que en febrero, el propio Arce anunció la llegada de cinco millones de dosis “y esos plazos no se cumplieron”, remarcó.

“En realidad, van a llegar al país menos dosis de las que se habían prometido en diciembre de 2020, que eran 5,2 millones y en enero de 2021 que eran 5 millones (de vacunas), además de las donaciones del mecanismo Covax que eran 5 millones (de vacunas), sumando eran 15 millones”, cuestionó luego la senadora Centa Rek.

“Tenemos que perseguir a un enemigo más grande que es el Covid-19, que se está arrebatando la vida de compatriotas”, dijo y cuestionó la “persecución política”.

Precisamente, en el marco del caso llamado 'golpe de Estado', ayer se presentó el expresidente de la Cámara de Diputados, Víctor Borda (MAS), y calificó de “ilegal”, como lo habían hecho otros actores políticos de su partido, la llegada de Jenine Áñez a la Presidencia. El Ministerio Público también prevé convocar a asesores políticos de líderes opositores.

El actual presidente de la Cámara de Diputados, Freddy Mamani, ayer optó por no brindar muchos comentarios sobre el proceso y destacó la vacunación. Incluso animó a la población a vacunarse cuanto antes y de ese modo “dejar los barbijos para retornar a esa vida (normal) que teníamos antes de la pandemia. Ese es nuestro objetivo y para eso necesitamos un trabajo conjunto”, apuntó.

Por su lado el canciller Mayta asguró que para su despacho, ya puede decir “misión cumplida”.