Los evangélicos ahora corean, “Cristo viene, Arce se va”. El Gobierno ve afanes desestabilizadores de la oposición

5 de octubre de 2021, 21:40 PM
5 de octubre de 2021, 21:40 PM

La decisión del MAS de postergar el tratamiento del proyecto de Ley contra la legitimación de ganancias ilícitas no paralizó la “agenda” de movilizaciones que proyectaron distintos sectores hasta el 11 de octubre. Las marchas y bloqueos que plantearon no sufrieron ninguna modificación.


“Estamos convocando para el lunes 11 de octubre a las Iglesias Evangélicas Unidas a ser parte de las movilizaciones, levantamos altares porque todos lo que se desata en los cielos se desata en la tierra. Vamos a ser parte activa de las movilizaciones como fuimos anteriormente”, adelantó el pastor Luis Aruquipa, que forma parte del nuevo Bloque de unidad que forjaron distintos sectores en Santa Cruz. Recordó que en 2019 ellos crearon el lema, “Cristo viene, Evo se va” y este martes en la marcha en que acompañaron a los gremiales de El Alto, el grito cambió a, “Cristo viene, Arce se va”.


Daniela Hidalgo, representante de la Resistencia Juvenil Cochala afirmó que este martes fue el primer paso para mostrar el Gobierno la oposición que tiene en las calles y relató que la plaza 14 de Septiembre en Cochabamba se abarrotó de ciudadanos que apoyaron al alcalde, Manfred Reyes Villa. Adelantó también que el 7 de octubre habrá otra movilización de apoyo al burgomaestre en la audiencia que se realizará ese día.


El diputado Beto Astorga (CC), quien estuvo en la reunión del martes en Santa Cruz, aseguró que la decisión del MAS de postergar el tratamiento del proyecto de Ley no significa nada, porque pueden retomar el mismo en cualquier momento y por eso se exige su archivo definitivo.


Asimismo, dijo que ese proyecto es solo uno de los puntos de la demanda del bloque de unidad que surgió en Santa Cruz y recordó que hay otros temas como la liberación de todos los presos políticos, como la expresidenta, Jeanine Áñez, sus exministros y los miembros de la resistencia juvenil en Cochabamba, la reposición de los policías y militares procesados, el cese de la persecución hacia el Gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho y de los alcaldes, Manfred Reyes Villa e Iván Arias, entre otros.


Manuel Morales, representante del Comité Nacional de Defensa de la Democracia (Conade), aseguró que el bloque de unidad nació con el objetivo de resistir el abuso desde el Gobierno que aprueba las normas que persiguen a sus opositores. Recordó que la unidad de los sectores llevó al expresidente Evo Morales a anular el tratamiento del Código del Sistema Penal en enero de 2018.


Explicó también que con estas movilizaciones, los partidos opositores tendrán musculatura política dentro del parlamento, ya que hasta el momento poco o nada pudieron hacer frente a la arremetida del MAS y su mayoría.


Desestabilización


En el otro extremo, las autoridades y dirigentes del MAS rechazaron las movilizaciones y las calificaron como un intento de desestabilizar al Gobierno de Luis Arce. La ministra de la Presidencia, María Prada, dijo que la reunión que se realizó en Santa Cruz estaba conformada por personas que tienen intereses políticos y económicos y no son reivindicativos.


El diputado Héctor Arce (MAS) informó que la movilización que planteó el oficialismo el 12 de octubre mostrará la fuerza política en las calles que tiene el Gobierno y para ese fin convocaron a sus sectores a marchar en defensa de la whiphala.


El ejecutivo de la Confederación de campesinos, Eber Rojas, adelantó que hasta el jueves habrá una reunión del Pacto de unidad, conformada por la Csutcb, interculturales, Conamaq, mujeres campesinas y Cidob, donde se tomarán más decisiones.


Mientras, el expresidente, Evo Morales, afina la convocatoria a su denominado “estado mayor del pueblo”, cuyas organizaciones deben reunirse antes del 12 de octubre y para ese fin convocaron al presidente Luis Arce y al vicepresidente, David Choquehuanca, a una “reunión de evaluación”.