Santa Cruz
Envían a la cárcel a extrabajadora de guardería municipal acusada de agresión a menores
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El Tribunal de Sentencia Penal Primero del municipio de Guayaramerín, Beni, sentenció a 30 años de prisión al brasileño Adriano Pereira Vieira, de 34 años, por asesinar al guardia de seguridad David Guardia Mano, de 56 años, el pasado 22 de mayo.
El fiscal departamental del Beni, Gerardo Balderas, informó que el brasileño decidió someterse a una audiencia de procedimiento abreviado, en la que se declaró culpable del delito de asesinato y recibió la pena máxima, a cumplirse en la cárcel de Guayaramerín.
“Entre las pruebas ofrecidas por la Fiscalía están: el acta de registro del lugar de los hechos, donde se colectaron indicios materiales, como una barra de fierro con la que se habría victimado al hombre; acta de levantamiento legal del cadáver, que se encontraba enterrado con signos de violencia; autopsia médico legal, que determinó que el cuerpo tenía una herida contusa en la región del cuero cabelludo, heridas cortantes en el rostro, fractura de cráneo y otros que fueron suficientes para que el sindicado sea sentenciado”, aseguró Balderas.
El miércoles 22 de mayo de 2024, Adriano Pereira Vieira arribó a Guayaramerín, procedente de Santa Cruz, en busca de trabajo para después regresar a Brasil. Fue así que el denunciante de este caso, René Orosco, lo contrató para que trabaje junto al David Guardia Mano cuidando un garaje.
Adriano Pereira Vieira y el guardia se quedaron en la noche cuidando el lugar. Sin embargo, al siguiente día regresó René Orosco, dueño del garaje, y se percató de que David Guardia Mano había desparecido y solo encontró algunas de sus pertenencias manchadas con sangre, según informó Xavier Iván Ajhuacho, fiscal asignado al caso.
El propietario del garaje alertó a los familiares del guardia sobre su desaparición y cuando regresó al lugar se dio cuenta de que Adriano Pereira Vieira ya había quemado las pertenencias que estaban con sangre. Por esta razón, denunció el caso a la Policía.
Cuando los efectivos del orden ingresaron al garaje encontraron enterrado el cuerpo sin vida del guardia y con signos de violencia. La autopsia determinó que fue victimado con un fierro y una navaja.