Cada uno de los seis países (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Perú) que anunciaron a través de sus cancilleres que suspenderían su participación en la Unión Naciones Suramericanas (Unasur) deberán cumplir un trámite que va mucho más que “una simple cartita” y puede tomar hasta un año, explicó este lunes José Alberto Gonzales, presidente de la Cámara del Senado de Bolivia.

Explicó que cuando se constituyó Unasur, los 12 países integrantes ratificaron en sus congresos la participación de cada país. “En el caso de Bolivia, el 11 de marzo de 2009 depositó la ratificación que hizo el Congreso Nacional a través de la Ley 3931. El entonces presidente del Senado era Oscar Ortiz”.

En ese contexto, sentenció en primera instancia que si un país decide alejarse de Unasur, el congreso de cada país debe ratificarlo. Luego aclaró “no es suficiente una cartita que mandan seis cancilleres, diciendo que no participarán en las actividades. Entiendo que haya gente que aplaude, festeja, celebre y hasta anhela que se caiga la Unasur, pero esto sigue un procedimiento”.

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Enumeró los pasos para salir de Unasur. Lo primero que debe hacer cada país es ratificar la decisión de retirarse en el Congreso Nacional. “Eso se debe hacer con los procedimientos establecidos. Segundo, está el artículo 24 de la constitución de Unasur que habla de la denuncia. Luego del trámite en el congreso, la denuncia debe llegar a conocimiento de la Unasur lo cual puede tomar hasta seis meses y luego deben transcurrir otros seis meses para que se efectivice, durante los que el país sigue como parte de esta instancia internacional”.

Seis ministros de exteriores enviaron una nota al canciller Fernando Huanacuni, según la interpretación de Gonzales, “en la que informaron que hasta no se organice la Unasur, se defina quién será el secretario y cómo funcionará, se abstendrán de participar. Esto es una cosa, otra muy distinta es pretender que Unasur murió”.

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