Este año, Tupperware celebra un hito importante en Bolivia: 25 años de presencia en el país, consolidando una marca que no solo aporta productos de calidad sino también una plataforma de negocio que ha empoderado a miles de bolivianos. Fundada en Estados Unidos hace 75 años por Earl Tupper, la empresa es reconocida mundialmente por sus innovadores envases de plástico libres de BPA, capaz de conservar los alimentos de forma hermética y segura. Sin embargo, el éxito global de Tupperware se debe en gran medida a Brownie Wise, quien en los años 50 popularizó el sistema de ventas directas mediante las “fiestas Tupperware”, un concepto que sigue vigente y que permite a miles de personas comercializar los productos de manera accesible y personal.
En Bolivia, Tupperware inició su trayectoria en 1998 y desde entonces ha crecido de forma exponencial, alcanzando hoy una fuerza de ventas cercana a las 10.000 personas, principalmente mujeres. Esta modalidad de venta directa ha ofrecido una oportunidad de negocio para quienes buscan independencia financiera y flexibilidad laboral. “Para nosotros, celebrar 25 años en Bolivia es un orgullo enorme”, comenta la gerencia de Tupperware en el país. “Este éxito es fruto del esfuerzo de un equipo dedicado y de una fuerza de ventas comprometida, en su mayoría integrada por mujeres abnegadas y luchadoras. Nuestro lema siempre ha sido ‘Empoderar a las personas y ayudarlas a mejorar sus vidas’, y Bolivia no ha sido la excepción”.
En sus primeros años en Bolivia, Tupperware tuvo que superar el reto de posicionar una marca y un producto que, si bien ya tenía fama mundial, no era conocido a nivel local. La clave del éxito, según sus directivos, radicó en la calidad del producto y en el innovador modelo de incentivos de Tupperware, que permite a los distribuidores acceder a comisiones y premios de acuerdo con sus ventas.
Además, la compañía ha sabido adaptarse a los cambios en el mercado y en las expectativas de sus consumidores. “El catálogo de Tupperware ha evolucionado mucho en estos 25 años”, explica la gerencia. “Hoy no solo ofrecemos productos prácticos y duraderos, sino también una presentación mucho más atractiva y accesible. La digitalización nos ha permitido que los clientes accedan a nuestro catálogo de forma rápida y eficaz, además de productos ecológicos que ayudan a reducir el uso de plásticos desechables”.
Tupperware, sinónimo de calidad y de oportunidad de negocio
A lo largo de estos 25 años en Bolivia, Tupperware ha dejado una marca profunda en muchos hogares. No solo se ha ganado la confianza de sus consumidores con productos de alta calidad, sino que ha sido una fuente de ingresos significativa para miles de familias bolivianas. Hoy, muchas mujeres en el país ven en Tupperware la posibilidad de generar ingresos mensuales de hasta $us 1.000 o incluso 2.000, trabajando en su propio entorno y desarrollando habilidades empresariales.
“Este sistema de ventas ha tenido un impacto positivo en la economía de nuestros clientes, porque al conservar mejor los alimentos también se generan ahorros significativos”, comenta la gerencia. La empresa, además, se ha adaptado a las necesidades específicas del mercado boliviano, ofreciendo productos que se ajustan a la vida diaria de las amas de casa, estudiantes y trabajadores en múltiples contextos. “Tupperware se ha convertido en una marca sinónimo de organización y practicidad en el hogar, pero también en una vía para mejorar la calidad de vida de sus distribuidores”, asegura.
Con miras a continuar su expansión y a seguir siendo una fuente de oportunidades, Tupperware tiene planes importantes para Bolivia a mediano plazo. La empresa proyecta inaugurar su propio edificio en 2025, lo cual subraya su compromiso con el mercado boliviano. Además, Tupperware seguirá apostando por capacitar gratuitamente a sus distribuidores, brindándoles herramientas de negocio y una amplia variedad de incentivos.
En un contexto en el que cada vez más personas buscan oportunidades de negocios accesibles y flexibles, el modelo de Tupperware se mantiene vigente. “Nuestro objetivo es seguir brindando oportunidades de crecimiento a toda persona que desee formar parte de nuestra familia y mejorar sus condiciones de vida”, finaliza la gerencia. Con estos 25 años de trayectoria en Bolivia, Tupperware demuestra que su misión de empoderar a las personas y mejorar sus vidas sigue siendo tan relevante hoy como lo fue en sus inicios.
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