Joselito Vaca por el suspendido Rafinha y con José Vargas como ayuda en la función de nexo entre el medio y el ataque, Blooming se presenta esta noche ante Guabirá (19:30) en procura de seguir prendido en la pelea por el título del Apertura 2019. Nacional Potosí (37 puntos) no se alejó tras caer el viernes ante Bolívar (35) (0-1) y dejó abierta la chance de que la academia cruceña, con 31 puntos, hoy tenga la chance de acercarse más si es que le gana al azucarero.

Los que pasaron fueron días de mucha intensidad para Erwin Sánchez y sus dirigidos, pero también de análisis y decisiones para la dirigencia. Tras el mazazo que significó caer el domingo ante Nacional (0-1), se decidió por concentrarse durante 30 días en Cochabamba tras el partido ante Always Ready y así ganar oxígeno y acortar la diferencia que suelen sacar los locales cuando Blooming los visita. La apuesta es al ‘todo o nada’ y es por eso la consciencia que hay de que en casa hoy no se puede fallar.

No estará el brasileño Rafinha que vio su quinta tarjeta amarilla ante Nacional cuando reaccionó en procura de agilizar el partido con el arquero rival exagerando una falta, pero sí estará Joselito Vaca en función de armador, una tarea que conoce bien por su visión y asociación de juego. En el último partido el equipo cayó en desesperación cuando no llegaba el gol, un aspecto que el técnico apunta a corregir con el ingreso desde el inicio de un experimentado en este tipo de momentos.

Guabirá se presenta como un retador al momento celeste. El DT Eduardo Espinel, anticipó un 4-1-4-1 en procura de tener fortaleza en la parte de atrás y llegar con mucha gente al área rival cuando se generen jugadas en ofensiva. Es decir que Javier Lezcano tendrá como lugartenientes a Marcelo Aguirre, Gualberto Mojica, Miguel Ríos y Juan Carlos Montenegro; el objetivo es no desaprovechar las oportunidades que se pueda generar cerca del área que estará defendida por Rubén Cordano.

Roly Paniagua y Erwin Sánchez en plena conversación durante la práctica de Blooming. Foto: Fuad Landívar

Por otra parte, y además de Joselito, la otra gran novedad en el once es el ingreso de Gabriel Ríos en lugar de Leo Vaca en ofensiva, en procura de aprovechar la velocidad que también tiene este jugador y que además no ha tenido el desgaste de Leo Vaca que ha jugado casi todos los partidos del torneo, además de viajar con la selección nacional. Ríos tendrá muy de cerca al brasileño Rafael Barros que igual está con unas tremendas ansias de tomarse la revancha tras lo sucedido el domingo.

Para Blooming no hay otra opción que una victoria para seguir prendido en la lucha por el título y para seguir haciendo soñar a sus hinchas. Por cierto, la campaña en las redes es para volver a abarrotar las graderías del Tahuichi. Platiní, sus jugadores y la dirigencia lo saben y es por ello la apuesta plena por quedarse con tres puntos vitales. La victoria de Bolívar fue bien vista porque permitió que Nacional Potosí no se aleje demasiado ya que de haber ganado hubiera dado otro golpe de autoridad en casa.

Es importante destacar que habitualmente los duelos entre cruceños suelen ser atractivos y Guabirá anticipa dura pelea. Con Espinel al mando el equipo ha recuperado la ambición de ir hacia el frente y tiene material para hacer daño. Además de los experimentados Gualberto Mojica y Marcelo Aguirre, son una amenaza Miguel Ríos y el veloz Juan Carlos Montenegro que irá por izquierda en procura de aprovechar la buena diagonal que tiene.

En los celestes Vargas también va de entrada. Sánchez ha cuidado cada detalle en procura de no fallar ya que es la recta final del Apertura y cada aspecto cuenta. Para Blooming hoy es ganar o ceder, y no están dispuestos a lo segundo.