ECONOMÍA
PGE 2025 aumenta recursos a gobernaciones, alcaldías y universidades
El presupuesto para la próxima gestión contempla Bs 39.194 millones, mientras que en este 2024 la cifra era Bs 38.749 millones.
Siete de los nueve gobernadores del país manifestaron su rechazo al proyecto de ley del Presupuesto General del Estado (PGE) 2025 elaborado por el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, argumentando incumplimientos de acuerdos previos por parte del Gobierno nacional. Mario Aguilera, gobernador en ejercicio de Santa Cruz, accedió a una entrevista con EL DEBER para hablar del PGE 2025, la situación económica en Bolivia y el inicio de protestas sociales.
_¿Tuvieron la oportunidad de revisar las cifras del PGE 2025? ¿se tomaron en cuenta los datos del último Censo de Población y Vivienda?
La verdad, eso es un análisis que vamos a tener hoy día (ayer), cabalmente, con los gobernadores del país. Tenemos conocimiento de la nueva propuesta, con algunas modificaciones y sobre todo algunas cosas que nos llaman poderosísimamente la atención.
Para puntalizar, en el PGE se establece un crecimiento del 12% en inversión o gasto público que está fundado, cabalmente, en un monto, un volumen de capital que no existe dentro del país. Eso implica seguir todavía trabajando en la idea de endeudar aún más al país. Sin embargo, nosotros tenemos propuestas muy interesantes con respecto a, cabalmente, esa condición que ahora tiene en emergencia al país, por la falta de divisas.
Y otro de los temas que trataremos con los gobernadores, será el ingreso de divisas al país por modelo concesionario, construyendo, obviamente, una seguridad jurídica que permita o seduzca la inversión privada en el país.
_¿Esa es una de las propuestas que tiene Santa Cruz para resolver la crisis económica?
Sí, esa es una de ellas. Una crisis que no es temporal, que se ha venido desarrollando desde hace mucho tiempo y que ahora estamos obligados a corregir el rumbo. Encontrar un norte que nos permita seguir desarrollando como región, como departamento y como país. Porque esta es una normativa que se aplica a escala nacional.
Otro de los temas que vamos a tocar importantes hoy, que ya hizo un anuncio el Gobierno nacional, es la posibilidad de ingresos de divisas por captación de bonos de carbón. Eso también es una iniciativa que nosotros hemos presentado en el Consejo Nacional de Autonomía, en las reuniones con los gobernadores y el Gobierno nacional, hace algunos meses.
Esta iniciativa ahora está tomando forma y permitiría generar ingresos de divisas al país, pero sobre todo para los gobiernos subnacionales, municipales, departamentales, autonomías indígenas y del Gobierno nacional, que solventen los recursos necesarios o demandados para la protección de esos bosques, que nos dan una calidad de vida, la sostenibilidad de ese sistema, ese biosistema, pero que además es necesario para el sector productivo de nuestro departamento.
Entonces, esta otra posibilidad de ingresos de divisas pasa por estos bonos. Y después, temas adicionales que estamos tocando, que son transversales ya en la historia, demandadas desde Santa Cruz, la libre exportación, el uso de biotecnología para tener mayor productividad, y sobre todo especificar en temas o proyectos de inversión pública que tengan impacto directo en la productividad de nuestros departamentos.
_Entonces, el Estado tendría que estar para facilitar el trabajo del sector privado...
Indiscutiblemente. Yo creo que este proceso de conversa y entendimiento es la cualidad de los cruceños de encontrar oportunidades.
_Gobernador, el martes 26 fue el ‘Anillazo’ (una protesta contra la crisis económica) y de ahí se viene también un cabildo. ¿Hay el temor de que empiece una ola de protestas precisamente por la situación crítica de la economía?
Las protestas se han sostenido durante mucho tiempo. Es un derecho de la población manifestarse. Ayer fue, creo, una de las primeras acciones o eventos donde el pueblo ha elevado su voz en reclamo a una crisis que es agobiante, que es preocupante, que tiene que ver con la sustentabilidad económica, el modelo que tenemos ahora, pero sobre todo que atenta, uno, a la canasta familiar, que es el alimento de cada uno de los bolivianos, con una elevación en los precios, y segundo, es un impacto directo en la inversión, que genera empleo, industria, siembra.