La estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) enfrenta protestas y críticas ante la escasez de combustible en Bolivia y la demora en la descarga de buques en su terminal marítima. Durante dos semanas, YPFB sostuvo que la inactividad se debía a condiciones climáticas adversas y marejadas. Y hoy el capitán de Puerto de Arica, Cristhian León, dijo que tras la descarga del primer buque, se deberá esperar cinco días. 

Uno de los cuatro navíos cargados con combustibles para el mercado de Bolivia, los que se encuentran hace días a la gira en Arica, logró amarrar a las boyas del Terminal Sica Sica y, con esto, se permitió a un buzo conectar al buque con el Oleoducto Sica Sica-Arica (OSSA II). La operación dio inicio ayer a la descarga de 33 mil toneladas métricas de diésel procedente de Rusia. Este volumen alcanza para una semana del consumo nacional, según el presidente Luis Arce.

La situación acontece tal y como lo señaló León Zavala, al sitio web PortalPortuario. El Oficial Naval enfatizó que la Autoridad Marítima de Chile habilitó de manera “temporal y excepcional” al recinto portuario administrado por Yacimientos tras detectarse una ventana con condiciones climáticas favorables en la jornada del miércoles 31 de julio.

Con información de elmostrador.cl, la Capitanía de Puerto había suspendido las operaciones en la infraestructura desde el 26 de julio. La suspensión fue motivada por reparaciones programadas por YPFB para cumplir con normas ambientales y de seguridad marítima.

La prohibición fue oficializada mediante el Ordinario 12.600/20, que indica: “inhabilítase la operación del Terminal Marítimo Sica Sica, perteneciente a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos Transporte S.A., (Y.P.F.B)”. El documento establece que el terminal permanecerá cerrado hasta que se completen las reparaciones previstas en el Plan de Acciones Correctivas y que la Autoridad Marítima realice la inspección correspondiente.

El capitán León, confirmó que la inhabilitación fue necesaria debido a un plan de mantenimiento programado por YPFB, aprovechando una ventana de mal tiempo y marejadas. "Una de las boyas se desplazó en mayo, pero permitimos operaciones bajo parámetros más restrictivos mientras YPFB presentaba un plan de mantenimiento que comenzó el 26 de julio", explicó León.

Pese al desplazamiento de la boya N° 3, el terminal Sica Sica ha recibido cuatro barcos y realizado siete faenas de amarre desde mayo.

León confirmó que las reparaciones comenzaron esta semana con la llegada de una barcaza que depositó cadenas y anclas en el fondo marino. No obstante, la operación fue interrumpida por la Armada debido a la mejora en las condiciones de las mareas, permitiendo la descarga del buque Zeynep, que transporta diésel, desde las 08:30 horas por un plazo de hasta 36 horas.

"Una vez finalizada la maniobra, el buque Zeynep deberá retirarse debido a las nuevas condiciones de altura de ola, que impedirán su amarre. Posteriormente, reanudaremos el mantenimiento de la boya, que podría durar otros cinco días", añadió León.

Para la reapertura del terminal, YPFB necesitará una nueva autorización de la Capitanía de Puerto, que inspeccionará las reparaciones para certificar que cumplen los estándares de seguridad marítima exigidos para la descarga de hidrocarburos. Solo entonces se permitirá la descarga de los otros tres barcos que transportan diésel, crudo y gasolina, llegados entre el 12 y 29 de julio.

Ministro de Obras Públicas de Bolivia viaja a Arica

El ministro de Obras Públicas de Bolivia, Edgar Montaño, se ha trasladado a la zona para evaluar la situación y buscar soluciones urgentes. YPFB ha advertido que la demora en la descarga podría causar un desabastecimiento de hasta 20 días.

La compleja infraestructura del terminal Sica Sica, sumado a las condiciones climáticas adversas, ha dificultado las operaciones de descarga y transporte del combustible hacia Bolivia. A esto se suma el descontento de los transportistas bolivianos, quienes han convocado a un paro de 72 horas en demanda de una solución inmediata al problema.

El 1 de marzo del año pasado, el Ministerio de Defensa Nacional de Chile, a través del Decreto N° 250, autorizó la denominada concesión mayor a la empresa boliviana YPFB, para la operación de la infraestructura marítima Sica Sica. El permiso contempla “una cañería subterránea y submarina del terminal del oleoducto Sica Sica – Arica, elementos de señalización de oleoducto y amarra para las naves en faena y una cañería de descarga al mar del agua purificada proveniente del deslastre de los buques tanques”.

La vigencia de la concesión es por 20 años y esta sería la tercera vez que se renueva, luego que en 1957 Chile y Bolivia firmaran un acuerdo para su construcción y funcionamiento.