La escasez de combustible es aprovechada por algunas personas que venden gasolina al raleo hasta en Bs 10 el litro, en la localidad de Montero. Esta situación quedó expuesta en un trabajo audiovisual realizado por el Diario Zona Norte, que informa sobre la realidad de la región del Norte Integrado.

Bolivia vive una escasez de combustible que se ha recrudecido por los más de 20 puntos de bloqueos que mantienen seguidores del expresidente Evo Morales. El mandatario es acusado de estupro y trata de personas. Ante estas denuncias sus partidarios determinaron realizar esta extrema medida hasta que los cargos sean levantados.

Esta recrudeció los problemas en la distribución de combustible en todo el país generando largas colas en las diferentes estaciones de servicio. De hecho, en Montero, el lunes, siete surtidores no tenían producto para vender.

En este escenario surgen un lucrativo negocio: la venta al raleo de gasolina. Cámaras del Diario Zona Norte, expusieron a estas personas que venden este producto a Bs 10 el litro, la gente que, ante la desesperación de no hallar el carburante, terminan pagando este precio.

Otro dato que llama la atención que la coloración de la gasolina que es rojiza. La venta se hace a la intemperie y los vendedores trasiegan manualmente el carburante de un bidón. Otras venden botellas de uno y dos litros.

Por su parte, la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) mediante un comunicado difundido en sus redes sociales informó que “en operativos de control e interdicción, personal de la de esta entidad estatal en SantaCruz, en coordinación con la Policía boliviana intervino puntos de venta ilegal de combustibles en Montero.

Además, el reporte de la entidad señala que se logró incautar Gasolina Especial que pretendía ser comercializada sin autorización.

En tanto, el problema por el abastecimiento de combustible persiste en el país. Desde diferentes regiones del país se informa sobre colas interminables de vehículos en busca de gasolina y diésel.

Mientras que el presidente de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, admitió que existen retrasos logísticos que demoran la distribución de combustible en diferentes regiones del país y generan una sensación de escasez.

“Evidentemente existen retrasos logísticos que pueden hacer que haya una sensación de que el combustible no está llegando. Tuvimos días en los que el combustible no llegó, lo cual evidentemente ahora tenemos que ir reponiendo esos volúmenes para que los camiones que están en nuestras refinerías poder tener un combustible más liviano, o sea, la gasolina”, explicó el ejecutivo.