El Ministro de Desarrollo Productivo y Economía Plural, Néstor Huanca, informó que el Gobierno realizará mayor control en las zonas fronterizas, con el fin de frenar el contrabando de alimentos producidos en Bolivia y que son trasladados de forma irregular a países vecinos. Hace varias semanas el país registra problemas en el abastecimiento de arroz y carne. Además, la autoridad sostuvo que los infractores pueden ser sancionados con entre 10 y 14 años de cárcel.
Para dar curso a esta iniciativa, se aprobó un Decreto Supremo que reglamentara la Ley 100 de Desarrollo Fronterizo, vigente de 2011.
"Con estas medidas vamos a contribuir a que ese contrabando disminuya y que también se estabilicen los precios en el mercado interno", señaló.
Con esta reglamentación se crea el Consejo para el Desarrollo Fronterizo y la Seguridad, que se encargará de controlar el traslado de una lista de alimentos sujetos a vigilancia, tales como: arroz, carne de pollo, aceite, azúcar, carne de res, cerdo, huevo y otros productos clave como el ganado en pie.
"Estos productos van a ser controlados y para ello se van a emitir certificados de abastecimiento en áreas fronterizas", explicó el ministro.
La autoridad aclaró que los alimentos destinados al consumo doméstico en pequeñas cantidades no estarán afectados por esta normativa, al igual que las exportaciones formales de productos que cuenten con la declaración de exportación correspondiente (DEX).
En esa línea, Huanca explicó que, para reforzar la lucha contra el contrabando, el Ministerio de Defensa gestionará la apertura de oficinas regionales del Viceministerio de Lucha Contra el Contrabando en varios municipios fronterizos.
Hizo notar que el incumplimiento de esta norma se considerará contrabando de exportación agravado, lo que conllevará penas de 10 a 14 años de prisión, además del decomiso de las mercancías.
La autoridad sostuvo que se han realizado reuniones con las autoridades de Desaguadero, de Bermejo, Puerto Suárez, Puerto Quijarro y Yacuiba, "quienes han manifestado su conformidad de aplicación de este decreto supremo", pero han pedido que se aplique a productos específicos que son de mayor preocupación en este momento.
Escasez y alza de precios
En estos momentos el país vive una escasez de productos esenciales como el arroz y la carne bovina. Esto ha hecho que los precios de estos productos se eleven en los mercados.
El arroz de primera, de costar 6 bolivianos ahora se cotiza entre 12 y 14 bolivianos. Ante esto, la estatal Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) comenzó a vender arroz subsidiado. No obstante, la oferta del Estado no calma la demanda de la población.
Por eso se han formado varias filas de personas en las diferentes tiendas que tiene la compañía en distintos puntos del país.
Lo mismo pasa con la carne; por efectos de la sequía, el costo del alimento comenzó a escasear. A esto se suma la especulación realizada por los intermediarios. Esto ha hecho que el costo del alimento llegue hasta los 45 bolivianos, el kilo de primera.