La reciente aprobación del Decreto Supremo 5210, que establece arancel cero para la importación de materias primas e insumos utilizados en la fabricación de medicamentos, ha sido recibida como una señal positiva por parte de la industria farmacéutica, pero todavía no resuelve la falta de dólares. La gerente general de Laboratorios Bagó de Bolivia, María Reneé Centellas, señaló que, si bien la medida permitirá una reducción modesta en los costos operativos de las empresas, su impacto será limitado.
Centellas destacó que la eliminación del gravamen arancelario, que anteriormente oscilaba entre el 10% y el 15% para la internación de insumos destinados a la industria farmacéutica, representa un avance importante y un alivio para el sector. Sin embargo, subrayó que el problema más significativo sigue siendo la falta de acceso a divisas, lo cual encarece las transferencias bancarias hasta en un 60%, afectando directamente el costo de las materias primas.
"Este decreto nos beneficia, dado que, en promedio, solo entre el 25% y el 30% del total de nuestras importaciones ya tenía un arancel cero debido a acuerdos binacionales con algunos países. El resto estaba sujeto a un impuesto que fluctuaba entre el 10% y el 15%. Por lo tanto, si esta fluctuación se reduce a cero, es una ayuda parcial", explicó Centellas.
No obstante, la ejecutiva enfatizó que el desafío principal radica en la escasez de divisas, lo que incrementa el costo directo de las materias primas e insumos importados, debido a que al precio fijado por el proveedor se le debe añadir un porcentaje adicional por el costo de la transferencia bancaria.
"Aplaudimos esta medida del Gobierno de eliminar los aranceles, pero también esperamos que se atiendan las necesidades del sector farmacéutico en cuanto al acceso a las divisas requeridas, como ya se hizo hace unos meses", concluyó la gerente general de Laboratorios Bagó Bolivia.