Tras la elección de Javier Milei como presidente de Argentina, especialistas consultados por EL DEBER sostienen que la relación entre el vecino país y Bolivia estará marcada por la agenda económica y no así ideológica, como se mantuvo durante la gestión del presidente saliente Alberto Fernández.

Milei un outsider en la política del vecino país ganó las elecciones en segunda vuelta con amplio margen con relación a Sergio Massa, candidato del peronismo.

Su elección, para muchos, marca el fin del peronismo y el comienzo de una nueva era marcada por sus ideas liberales. No es para menos es el primer presidente de esa corriente, en ese país.

Rechazando el termino de ultraderechista, Milei se siempre se ha declarado liberal-libertario. Además, rechaza abiertamente las ideas de izquierdas y el peronismo.

Incluso sostuvo que cuando asumiera cortará relaciones con Estados que considera enemigo de las ideas libertarias.

Relación con Bolivia

El Gobierno del presidente, Luis Arce, mantuvo una buena relación con su par argentino Alberto Fernández, ambos mandatarios no ocultaron nunca su simpatía y cercanía ideológica. 

Al saber los resultados, Arce mantuvo una postura neutral y no usó adjetivos descalificativos contra el presidente electo de Argentina, como sí lo hicieron el expresidente Evo Morales y el actual presidente de la Cámara de Senadores Andrónico Rodríguez. 

“El Estado Plurinacional de Bolivia siempre será respetuoso de la voluntad democrática de nuestros pueblos. Deseamos prosperidad al hermano pueblo de Argentina y éxitos a su presidente electo, Javier Milei”, dijo Arce desde su cuenta en X (antes twitter). 

Añadió que “trabajaremos para que las relaciones entre nuestros pueblos sigan firmes como hasta ahora, con base en la hermandad, complementariedad y respeto mutuo”.

El especialista, Jaime Dunn, sostuvo que si bien Milei tiene un marcado distanciamiento con las ideas de izquierdas y los gobiernos que siguen esa línea, no interferirá lo que decidan las personas o empresas argentinas.

“Bajo ese enfoque, lo que va a suceder es que el Gobierno encabezado por Milei no podrá tener relaciones con Bolivia, China, Nicaragua, o con Rusia, pero eso no va a impedir que los propios ciudadanos viendo sus intereses individuales o empresarial si lo hagan”, dijo.

Añadió que “uno de los temas más importantes de la política liberal es que el Gobierno no puede prohibir ni frenar a la gente de hacer lo que vea conveniente.

Oscar Tomianovic, investigador y libertario boliviano, indicó que la elección del nuevo presidente argentino puede hacer que las relaciones comerciales con el vecino país y Bolivia mejoren.

“Uno podría esperar una reducción en aranceles, en impuestos, en otra serie de medidas que entorpecen el comercio internacional, de modo que el flujo entre ambos países, se haría de una forma más natural y espontánea, con menores cuotas de intervención por parte del Gobierno argentino”, dijo.

El economista Darío Monasterio, aseguró que la dolarización propuesta por el presidente electo de Argentina frenará de alguna medida el tema de contrabando, sobre todo de productos que se producen en el país lo que beneficiará de alguna medida a la producción nacional.

Dunn, remarcó que primará los negocios y no la política entre ambos países. Recordó que Bolivia tiene a Argentina como uno de sus socios comerciales, a quién exporta gas natural.

“El Gobierno boliviano tiene que darse cuenta que ahora no va a primar la política, sino lo que es más conveniente para cada parte. si el Estado argentino, ve por hacer negocios con bolivianos lo hará”, dijo.

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